ORIENTACIONES PEDAGÓGICAS AÑO ESCOLAR 2016-2017
1
INTRODUCCIÓN
El Ministerio del Poder
Popular para la Educación (MPPE), como ente rector y orientador de las
políticas educativas del estado venezolano, presenta a los maestros, las
maestras, directores, directoras, estudiantes de todos los niveles y
modalidades, madres, padres, representantes, obreras, obreros, administrativos,
administrativas, cocineras y cocineros de nuestras instituciones educativas,
docentes en función supervisora, equipos zonales, voceros y voceras de los
Consejos Educativos, de Consejos Comunales y Comunas, estas ORIENTACIONES
PEDAGÓGICAS para el año escolar 2016-2017, con la finalidad de continuar,
fortalecer y profundizar en las políticas educativas fundamentales para el
proceso de refundación de la República, enmarcadas en la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela (CRBV), la Ley Orgánica de Educación (LOE) y
la Ley del Plan de la Patria 2013-2019 (Plan de Desarrollo Social y Económico
de la Nación 2013-2019). Luego del proceso amplio y plural de Consulta Nacional
por la Calidad Educativa realizado en el año 2014, donde participaron 7.233.489
ciudadanos y ciudadanas del país, las políticas y líneas estratégicas del
ministerio han estado dirigidas a responder a este mandato popular, de ahí la
PERTINENCIA Y LEGITIMIDAD de éstas. En el marco de las diez banderas surgidas
de esta consulta, convertidas en desafíos y hoy con grandes avances y logros,
podemos decir que seguimos en la dirección de 1) garantizar educación de
calidad para todas y todos, SIN NINGÚN TIPO DE EXCLUSIÓN; 2) desarrollar una
Pedagogía del amor, el ejemplo y la curiosidad, bandera que día a día cobra más
fuerza en la cultura escolar; 3) Fortalecer el papel de los maestros y las
maestras como actores fundamentales de la calidad educativa, con la voluntad
firme de garantizar cada día y progresivamente, las mejores condiciones
laborales y seguir consolidando el Sistema de Investigación y Formación que
permita la formación inicial y permanente como un derecho y desde el respeto y
reconocimiento de su práctica pedagógica; 4) Promover un clima escolar
caracterizado por la convivencia, con participación protagónica de los y las
estudiantes en la solución de los problemas, fortaleciendo el Plan Integrado de
Seguridad Escolar en, por y para el Vivir Bien; 5) Garantizar un sistema de
protección estudiantil, fortaleciendo la atención, el cuidado y protección de
los y las estudiantes en todos los niveles y modalidades de todos los contextos
(urbano, indígena, rural y de frontera); 6) Lograr una estrecha relación entre
las familias, la escuela y la comunidad, en función de garantizar la atención,
el cuidado y la formación integral de sus hijos e hijas, desde una gestión
escolar participativa y protagónica, consolidando los Consejos Educativos y
abriendo la escuela a la diversidad, la interculturalidad y la generación de
aprendizajes desde las características propias de cada localidad, redundando en
la formación en el hogar; 7) Desarrollar un currículo nacional integrado y
actualizado, bandera IMPOSTERGABLE Y ESPERADA en nuestras instituciones
educativas en todos los niveles y modalidades y en particular en el nivel de
educación media, profundizando en una perspectiva ética y pedagógica cada vez
más humanista y social, renovando planes de estudio, proyectos y estrategias,
priorizando LA VINCULACIÓN DEL ESTUDIO CON EL TRABAJO Y LA EDUCACIÓN CON LA
CREACIÓN Y LA PRODUCCIÓN; 8) Garantizar edificaciones educativas sencillas,
amigables, seguras y adecuadas para que los procesos de enseñanza y aprendizaje
se desarrollen en un ambiente agradable y con pertinencia social, cultural y
ambiental; 9) Desarrollar un sistema de evaluación de la calidad educativa y
consolidando una supervisión cada vez más humana, de orientación, de
acompañamiento pedagógico y seguimiento permanente; y 10) Reconfigurar la
organización y funcionamiento del Ministerio del Poder Popular para la
Educación en función de lograr una gestión participativa,
2
eficaz y transparente,
continuando con la consolidación de los circuitos educativos en todo el país y
haciendo más eficiente la gestión desde el Sistema de Gestión Escolar.
Por otro lado, queremos resaltar
que las orientaciones pedagógicas son producto de la sistematización de logros,
avances, dificultades, distorsiones, innovaciones y propuestas a partir de las
experiencias vividas durante el año escolar 2015-2016, tomando en consideración
los aportes de los maestros y las maestras, estudiantes, madres, padres,
representantes, obreros, obreras, administrativos, administrativas, cocineras y
cocineros de la patria, participantes todos y todas en los congresos
pedagógicos (municipales, circuitales y estadales), recogiéndose estas
propuestas en el Congreso Pedagógico Nacional realizado en Julio de 2016.
Igualmente se tomaron en consideración las propuestas realizadas por los
equipos zonales en la jornada nacional en mayo de 2016 y los aportes de los
equipos responsables en el Ministerio del Poder Popular para la Educación de
los niveles y modalidades. La participación protagónica como principio fundamental
de la refundación de la República siempre será garantía de pertinencia,
legitimidad y de consolidación de procesos genuinos en la revolución educativa.
TODO LO QUE SE HACE EN EDUCACIÓN
DEBE SER FORMATIVO, por lo que estas orientaciones contienen en sí mismas,
principios, preceptos, argumentos y planteamientos que invitan y convocan a la
reflexión permanente de la práctica pedagógica y a la transformación de la
cultura escolar, haciéndola cada vez más en, por y para la vida y para la
emancipación. A veces somos redundantes e insistentes en distintas secciones
del documento en cuanto a principios, argumentos y ejemplos. Éstos tienen la finalidad de resaltar de manera
permanente, las lógicas y métodos que debemos superar y las lógicas y métodos
que debemos construir entre todos y todas para una escuela con mayor
perspectiva, más productiva y más participativa. El año escolar 2016-2017 es un
año de profundización en el marco de una revolución educativa indetenible, un
proceso de transformación curricular que coloca en el centro del debate LOS
QUÉS, LOS POR QUÉS, LOS PARA QUÉS Y LOS CÓMOS de la escuela en la prefiguración
de la República que queremos y que necesitamos; así como la consolidación de
los circuitos educativos en un proceso de transformación institucional con
mayor organización y eficiencia en el territorio.
En la primera parte se presentan
las orientaciones para el inicio del año escolar 2016-2017 y luego el
desarrollo de las dos líneas estratégicas. Esperamos que estas orientaciones
sirvan de apoyo y de guía a todas las personas que participan activamente en el
hecho educativo, invitamos a su lectura, estudio y discusión colectiva. Que al
mismo tiempo sirvan para la formación permanente, la planificación y la
organización de las actividades escolares comenzando por un inicio de año
escolar lleno de entusiasmo, alegría y expectativa positiva para las acciones,
estrategias y decisiones que día a día se deben tomar siempre en función de
GARANTIZAR LOS FINES DE LA EDUCACIÓN y de satisfacer las necesidades educativas
de los niños, las niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas, como la
razón de ser fundamental de nuestras instituciones educativas, para formarlas y
formarlos como seres humanos de bien, como ciudadanos y ciudadanas de la
República.
Un mundo mejor es posible, si
juntos y juntas lo hacemos posible, con conciencia, conocimiento, compromiso,
dedicación, esfuerzo, constancia, trabajo y amor.
3
INICIO DEL AÑO ESCOLAR 2016-2017 Regreso a clase en el marco
del vivir bien “En paz y con alegría
iniciamos el año escolar” En el marco de la Mesa del Vivir Bien, coordinada
desde la Vicepresidencia del Área
Social, se desarrollará una programación intersectorial para el inicio del año
escolar 2016-2017: “En paz y con alegría iniciamos el año escolar”. El
Ministerio del Poder Popular para la Educación (MPPE) convoca a todos los
planteles del país a iniciar un año escolar con mucho compromiso en el
recibimiento amoroso de sus estudiantes, con alegría y entusiasmo, organizando
planes de trabajo intersectoriales con su respectivo cronograma, con el apoyo
de las familias, del Movimiento
Bolivariano de Familia (MBF), la Federación Nacional de Estudiantes de
Educación Media (FVEEM), la Organización Bolivariana de estudiantes (OBE),
Ministerio del Poder Popular para la Cultura (MPPC), Ministerio de Juventud y Deporte (MPPJD), Ministerio del
Poder Popular para la Salud (MPPS), IPASME, Ministerio del Poder Popular para el Eco socialismo y Agua (MPPEA);
Ministerio del poder Popular para las Comunas, Ministerio del Poder Popular de
Energía Eléctrica, Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria
Ciencia y Tecnología (MPPUCT), Ministerio del Poder Popular para la Agricultura
Urbana, CIARA, INCES, INIA; la Misión Árbol, MEVEN, Teatro César Rengifo, la
Gran Misión a Toda Vida Venezuela, Oficina Nacional Antidrogas (ONA), IDENNA,
UNAMUJER, IMPARQUE, FEDE, Alcaldías, Gobernaciones, Protectores Bolivarianos y
Protectoras Bolivarianas, entre otros organismos e instituciones según la
especificidad de los contextos en las regiones.
Orientaciones Metodológicas: En
el proceso de Integración intersectorial
logrado por los equipos de trabajo de la Mesa del Vivir Bien y las 28 zonas educativas del país,
continuamos el extraordinario trabajo
alcanzado de manera corresponsable del Plan Nacional de Recreación 2016, Plan
Vacacional Comunitario y el Plan Agosto de Escuelas Abiertas (Programa Todas
las Manos a la Siembra, Recreación, Grillas Culturales y Deportivas con Grupos
Estables Robinson 2 Productivo, Mantenimiento del Hábitat, Campismo, Reto
Juvenil…). Ahora en una nueva fase de concurrencia, sinergia y articulación,
estaremos consolidando los Colectivos Regionales de la Mesa del Vivir Bien en
el ámbito de Educación, durante los meses de septiembre y octubre del presente
año, fase de inicio de clases y por supuesto el plan general de la Mesa del
Vivir Bien correspondiente a todo el período escolar, por lo cual presentamos orientaciones
pedagógicas y metodológicas para avanzar acompañando a nuestras niñas, nuestros
niños, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas en el inicio de este nuevo año
escolar 2016-2017, con alegría, goce, disfrute, vocación, encuentro familiar y
comunitario:
• Coordinar y articular en
materia formativa, recreativa, ambiental, deportiva, cultural y de salud
integral comunitaria, dotación y mantenimiento de infraestructuras, todo el
plan de bienvenida al nuevo período escolar en cada estado, municipio y
circuito educativo. Para ello se orienta a organizar una mesa de trabajo para
el día martes 13 de Septiembre en cada estado, el miércoles se reúne la mesa
nacional y el día 15 de septiembre la mesa nacional del Vivir Bien realizará una
video conferencia para chequear el plan
y cronograma de trabajo de cada estado. • Planificar junto con las directoras y los directores de las zonas educativas como
instancia
4
coordinadora de “En paz y con
alegría iniciamos el año escolar”, en todas las instituciones educativas del
país, conjuntamente con la Organización Bolivariana de Estudiantes, el Movimiento
Bolivariano de Familia y los equipos de acompañamiento de formación y de supervisión en los Circuitos Educativos.
• Acompañar todos y todas con el espíritu de paz y alegría en este momento tan
importante para la educación venezolana, ya que se inicia un proceso de
transformación curricular favoreciendo espacios de discusión, construcción
colectiva, formación permanente y así lograr una nueva cultura escolar desde la
educación y el trabajo como los procesos fundamentales para alcanzar los fines
del estado venezolano en la superación del modelo rentista y en la construcción
del modelo productivo endógeno y sustentable, siempre desde la pedagogía del
amor, el ejemplo y la curiosidad. • Se ejecuta en instituciones públicas
oficiales (Nacionales, Estadales, Municipales, y Distritales) y privadas. •
Garantizar la participación del poder popular a través de los Consejos
Educativos, Consejos Comunales, Comunas, Comités Locales de Abastecimiento y
Producción (CLAP), movimientos sociales de base, Movimiento Bolivariano de
Familia y la Organización Bolivariana Estudiantil, espacios culturales y
deportivos del circuito educativo. Propósitos: 1.- Implementar acciones para
profundizar las entregas pedagógicas con mucho respeto y amor, desde la
comprensión de iniciar un proceso de continuidad cognitiva y afectiva, tanto
individual como colectiva, que implica favorecer la complementariedad, la
solidaridad, la cooperación, la convivencia, el diálogo y el respeto mutuo. 2.-
Desarrollar acciones formativas - productivas (formar produciendo-producir
formando), en Agroecología con los programas de Educación Ambiental y Todas las Manos a la Siembra
(desmalezamiento, ensemillamiento, preparación de la tierra, elaboración de
abono orgánico, siembra, cosecha, continuar con la formación agroecológica,
viveros, arborización), con el apoyo de los proyectos socio productivos de la
Misión Robinson 2 Productivo; organizar cantatas de la canción necesaria, actos
cívicos, teatro histórico, teatro César Rengifo, aulas recreativas, proceso de participación
en los distintos Grupos Estables, organización de grillas Artísticas
Culturales, impulso de las escuelas en Movimiento y toda la programación
organizada conjuntamente con la OBE, Juventud y Deporte, encuentro amoroso con
la naturaleza con la siembra de un árbol por cada niño, niña y joven, iniciar la construcción colectiva del mapa de
abordaje integral en el marco del Plan Integrado de Seguridad Escolar en, por y
para el Vivir Bien con la participación de la Gran Misión a toda vida Venezuela,
el Ministerio Público, Defensoría del Pueblo, Oficina Nacional Antidroga (ONA),
Prevención del Delito, Contraloría General de la República, entre otras. Es importante la promoción de la
cultura bolivariana y retomar la
importancia del acto cívico, éste se debe realizar todos los días antes de
iniciar cada jornada laboral, con reflexiones y análisis, donde participen
estudiantes, todo el personal de la institución, familias y vocerías
comunitarias. 3.- Impulsar y favorecer las políticas transformadoras de los
diversos programas y proyectos de la Educación Bolivariana en cada plantel y
circuito educativo: Canaima Educativa, Colección Bicentenario, Sistema Nacional
de Investigación y Formación,
Laboratorios de Ciencias, entre otros. 4.- Propiciar actividades en el
marco de consolidar los circuitos educativos, a través de
5
intercambios deportivos y
culturales, jornadas de mantenimiento junto con las vocerías del MBF, OBE,
Consejos Educativos, familias, Consejos Comunales, Comités Locales de Abastecimiento
y Producción (CLAP). 5.- Articular acciones de corresponsabilidad y contraloría
social con las vocerías de los Consejos Comunales que hacen vida en cada
institución educativa y los comités de trabajo de los Consejos Educativos. 6.- Planificar proyectos comunicativos
alternativos, articulando la promoción y
comunicación con medios alternativos, actividades de muralismo, impulsar el
periódico, radio escolar, Robinson digital, radio web, uso de las redes sociales,
entre otros. 7. Simultáneamente a la planificación y realización de las
actividades de bienvenida (todas son curriculares), se propone que los y las
docentes en todos los niveles y modalidades inicien la discusión y debates en
el marco del proceso de transformación curricular. 8. Considerar el plan de
inauguraciones escolares, para organizar la programación específica con
actividades de convivencia, recreativas, culturales, deportivas, ambientales,
Todas las Manos a la siembra, la entrega de la Canaima número Cinco Millones.
Distribución de los Veinte Millones de textos de la Colección Bicentenario,
atención del programa “La Salud va a la Escuela”, áreas de salud integral
comunitaria y consultorios escolares de atención primaria en salud, programa de
defensorías educativas, Uso racional y eficiente del agua y la energía entre otros. 9. Acompañar el cronograma de
entrega de Morrales, Útiles Escolares, dotación de Mobiliarios, Distribución de
Uniformes Escolares, la Regionalización del Programa de Alimentación Escolar.
10. El cronograma de trabajo debe indicar las acciones previas al inicio de las
actividades escolares (desmalezamiento, mantenimiento, reparaciones,
fumigación, abatización- LA GRAN CAYAPA ESCOLAR); así como todas las
actividades que se realizarán día por día, identificando los planteles que
atenderá cada organismo corresponsable, distribuyendo con equilibrio la
atención institucional, con su
respectiva fecha y organismos responsables, al igual coordinar el proceso de
seguimiento, sistematización y envío de reportes de avances, a la mesa nacional del vivir bien y al vice
ministerio de comunidades educativas y unión con el pueblo.
Se propone que el plan de trabajo
en cada institución, organice una
programación con actividades, temáticas
diarias y semanales a partir del día 26
de septiembre, por supuesto considerando las acciones previas conjuntas en el
mantenimiento de las infraestructuras antes del inicio de las actividades
escolares:
Día de la semana ACTIVIDAD Lunes
BIENVENIDA. Acto cívico, organización interna del programa alimentario,
actividades culturales, recreativas, encuentros de saberes, organización de los
grupos estables. Caracterización de las potencialidades del personal docente,
administrativo y obrero para ir perfilando los grupos estables y las
responsabilidades de cada organismo. Martes Acto cívico. Jornadas de
orientación y convivencia. Escuelas de familia. Articulación de los Consejos
Educativos (vocerías), Consejos Comunales, CLAP. Defensorías Educativas. Plan
Integrado de Seguridad Escolar en por para el Vivir Bien.
6
Miércoles Acto cívico. Ambiente,
Ecología y Jornadas de siembra, revisión de los espacios susceptibles de
siembra, organizar viveros, mantenimiento de la institución, trabajo
cooperativo de acondicionamiento de las aulas con la CAYAPA ESCOLAR, los
maestros y las maestras conjuntamente con sus estudiantes, personal obrero,
reparan mesas sillas, pintan, adornan, invitando a participar a las familias
(cayapa de amor a cada aula) acompañado por FEDE, Alcaldías y Gobernaciones, “La Salud va a la Escuela” área de atención
integral en salud comunitaria. Jueves Acto cívico. Inscripción y organización
de grupos estables. Actividades recreativas y formativas. Continuación de la
cayapa escolar y actividades comunitarias con el Movimiento Bolivariano de Familia
y la OBE. Viernes Acto cívico. Encuentros e intercambios culturales, deportivos
y recreativos estudiantiles. Proceso de diagnóstico físico y
antropométrico.
Semana del 19 al 23 de
septiembre: En el marco del proceso de transformación curricular, se orienta en
todas las regiones del país a la realización de jornadas con el siguiente
cronograma:
Lunes 19. Socialización y discusión del proceso de transformación
curricular con directores y directoras de las instituciones educativas en todas
las regiones del país.
Martes
20. Socialización y discusión del proceso de transformación curricular con
supervisores y supervisoras de todas las zonas educativas en todo el país.
Miércoles 21. Socialización y discusión del proceso de
transformación curricular con la Organización Bolivariana Estudiantil y la
Federación Nacional de Estudiantes de Educación Media; preparadores y
preparadoras estudiantiles; vinculantes, facilitadores, facilitadoras, tutores
y tutoras de la Micromisión Simón Rodríguez a nivel nacional.
Jueves 22. Socialización y discusión del proceso de transformación
curricular con la Micromisión Alimentación: cocineras y cocineros de la Patria
(Movimiento Fernanda Bolaños).
Viernes 23, Sábado 24 y Domingo 25: Jornadas de distribución de
morrales y útiles escolares. Es importante la participación activa y
protagónica de todos y todas, y que se
apoyen entre las distintas instituciones del circuito educativo. Cada zona
educativa servirá de articuladora con las distintas instituciones, movimientos,
misiones y organismos (nacionales, regionales, locales, comunales), para organizar con carácter formativo y permanente
la Mesa del Vivir Bien en el ámbito educativo.
LÍNEAS ESTRATÉGICAS AÑO ESCOLAR 2016-2017
Son innumerables los logros de la
Educación Bolivariana. El mayor de todos es el proceso de inclusión en la
Educación. Haber superado la cultura selectiva en la educación (cultura que
apuntaba en la década de los noventa a la privatización y al enfoque de que no
todos y todas eran “aptos” para estudiar), hacia una cultura de inclusión en la
educación como derecho humano, es el mayor giro que este proceso de refundación
le ha imprimido a la sociedad venezolana. La educación no solo no es un
privilegio de pocos sino que es una necesidad de todos y de todas.
7
De ahí, que el estado la asume
como obligatoria y como deber indeclinable desde el año 1999. Para el año
escolar 2016-2017 debemos dar el salto hacia una mayor pertinencia de la
educación con los retos de la nación, superando el rentismo petrolero y hacia
un modelo político, social, económico, cultural y ambiental de producción, para
lo que es impostergable una EDUCACIÓN QUE SE INTEGRE DE MANERA PERMANENTE CON
LA CREACIÓN Y LA PRODUCCIÓN DESDE EL TRABAJO.
Para asumir estos retos y con la
finalidad de continuar avanzando en la concurrencia, cohesión e integración de
los procesos, haciéndolos cada vez menos dispersos y más eficientes en el logro
de los propósitos y fines educativos, el MPPE organizó las políticas,
estrategias y acciones del año escolar 2016-2017 en dos grandes líneas
estratégicas:
1. Proceso de transformación
curricular. 2. Proceso de transformación institucional.
En la primera línea estratégica,
se inicia en el país un proceso de transformación curricular en todos los
niveles y modalidades, cada uno con sus diferentes desafíos y puntos nodales que resolver para alinear la
educación a los retos de la nación y profundizando en la coherencia y
continuidad que debe prevalecer entre todos (los niveles y modalidades) para
garantizar una perspectiva cohesionada en el marco de los logros de los fines
de la educación de la República Bolivariana de Venezuela. En la segunda línea
estratégica, se continuará con la consolidación de los CIRCUITOS EDUCATIVOS
como la expresión concreta en el territorio de PLANIFICACIÓN, ORGANIZACIÓN Y
FUNCIONAMIENTO EFICIENTE para garantizar la inclusión, prosecución y formación
integral de los niños, las niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas en
el sistema educativo, superando las viejas prácticas administrativas excluyentes,
desburocratizando la gestión escolar y acercándola cada vez más a la gente.
PROCESO DE TRANSFORMACIÓN CURRICULAR
Lo más importante que queremos
orientar en esta línea estratégica es su concepción de proceso, es decir, que
se realiza en un ambiente de permanente discusión, debates y revisión. No hay
verdadera pedagogía sin investigación, estudio, reflexiones, construcciones
colectivas, diálogo de saberes, encuentros y desencuentros. Allí radica la
verdadera riqueza de un proceso de transformación curricular en el cual se
encuentran los pedagogos y las pedagogas del país, propiciando la participación
de sus estudiantes, comunidades, familias y personal obrero y administrativo de
las instituciones educativas en la sistematización y revisión permanente de la
práctica educativa.
En el proceso de transformación
curricular se plantean aspectos comunes a todos los niveles y modalidades para
garantizar la formación integral de niños, niñas, adolescentes, jóvenes,
adultos, adultas (incluyendo las personas con discapacidad y necesidades
educativas especiales); la continuidad y la armonía afectiva – cognitiva, la
superación de la atomización y fraccionamiento del conocimiento, la superación
de la separación entre el trabajo manual y el intelectual, la articulación
permanente entre el aprender a ser, a hacer, a conocer y a convivir y, la
formación desde el trabajo, la creación y la producción.
8
En este sentido, planteamos como
comunes a todos los niveles y modalidades en el proceso de transformación
curricular: 1. Los fines de la educación establecidos en la Ley Orgánica de
Educación y los referentes éticos y procesos indispensables derivados de éstos.
2. CURRÍCULO ES TODO. Concepción del currículo como todo aquello que se hace en
la escuela para el logro de la formación. No existen “actividades
extracurriculares”, “complementarias” o “extracátedra”. Es importante que la
escuela, la familia y la comunidad comprendan que todo lo que se hace en la
escuela es currículo, es decir, la siembra, la alimentación adecuada,
participar en un grupo estable, los buenos días en la mañana, el ejemplo de sus
adultos y adultas, el buen consejo, la asamblea comunitaria para resolver un
problema. 3. Currículo integrado, en tanto supera el fraccionamiento y
atomización del conocimiento e integral, en tanto aborda como un todo los
aspectos culturales, geohistóricos, ambientales, sociales, económicos y políticos
de la vida de los seres humanos. 4. Los grupos estables y el PTMS como
estrategias curriculares fundamentales para transformar las lógicas y los
métodos teoricistas, hacia la construcción de aprendizajes desde lo
teórico-práctico y productivo. Formar produciendo y producir formando.
Educación desde, en, por y para el trabajo. 5. La discusión. Cada nivel y
modalidad tiene sus características propias según la población que atiende
(período de vida que aborda, contextos diversos, diferencias propias de cada
estudiante con sus diversos ritmos y desarrollos) y según los propósitos del
nivel o la modalidad. El proceso de transformación curricular es una invitación
pedagógica para abrir espacios permanentes de discusión de lo que se viene
haciendo, los procesos que se desarrollan, las estrategias que se implementan.
Es un debate formativo desde la práctica pedagógica. ¿se logra, por ejemplo, el
desarrollo del potencial creativo de los niños y las niñas a partir de lo que
se realiza en las aulas?, ¿se garantiza la integración familiar y social de las
personas con necesidades educativas especiales?; ¿se desarrolla la capacidad de
abstracción y el pensamiento crítico con métodos innovadores que privilegien el
aprendizaje desde la cotidianidad y la experiencia?, ¿aprenden nuestros y
nuestras estudiantes a desenvolverse y transformar desde las experiencias que
viven en las escuelas y liceos?, ¿son felices nuestros niños, niñas,
adolescentes y jóvenes en nuestras escuelas y liceos?, ¿se sienten seguros,
cuidados y protegidos nuestros y nuestras estudiantes en las instituciones
educativas donde estudian?, ¿se cumplen los fines de la educación?. Orientamos
entonces que en las instituciones educativas de todos los niveles y
modalidades, el proceso de transformación curricular se convierta en una
oportunidad de discusión donde repensemos la práctica educativa con sus
enfoques, lógicas, métodos y perspectivas.
Fines de la educación y los
referentes éticos y procesos indispensables La Ley Orgánica de Educación (LOE)
en su artículo 15 establece como los fines de la Educación: 1. Desarrollar el
potencial creativo de cada ser humano para el pleno ejercicio de su
personalidad y ciudadanía, en una sociedad democrática basada en la valoración
ética y social del trabajo liberador y en la participación activa, consciente,
protagónica, responsable y solidaria, comprometida con los procesos de
transformación social y consustanciada con los principios de soberanía y
autodeterminación de los pueblos, con los valores de la identidad local,
regional, nacional, con una visión indígena, afrodescendiente, latinoamericana,
caribeña y universal.
9
2. Desarrollar una nueva cultura
política fundamentada en la participación protagónica y el fortalecimiento del
Poder Popular, en la democratización del saber y en la promoción de la escuela
como espacio de formación de ciudadanía y de participación comunitaria, para la
reconstrucción del espíritu público en los nuevos republicanos y en las nuevas
republicanas con profunda conciencia del deber social. 3. Formar ciudadanos y
ciudadanas a partir del enfoque geohistórico con conciencia de nacionalidad y
soberanía, aprecio por los valoración patrios, de los espacios geográficos y de
las tradiciones, saberes populares, ancestrales, artesanales y particularidades
culturales de las diversas regiones del país y desarrollar en los ciudadanos y
las ciudadanas la conciencia de Venezuela como país energético y especialmente
hidrocarburífero, en el marco de la conformación de un nuevo modelo productivo
endógeno. 4. Fomentar el respeto a la dignidad de las personas y la formación
transversalizada por valores éticos de tolerancia, justicia, solidaridad, paz,
respeto a los derechos humanos y la no discriminación. 5. Impulsar la formación
de una conciencia ecológica para preservar la biodiversidad y la
sociodiversidad, las condiciones ambientales y el aprovechamiento racional de
los recursos naturales. 6. Formar en, por y para el trabajo social liberador,
dentro de una perspectiva integral, mediante políticas de desarrollo humanístico,
científico y tecnológico, vinculadas al desarrollo endógeno productivo y
sustentable. 7. Impulsar la integración latinoamericana y caribeña bajo la
perspectiva multipolar orientada por el impulso de la democracia participativa,
por la lucha contra la exclusión, el racismo y toda forma de discriminación,
por la promoción del desarme nuclear y la búsqueda del equilibrio ecológico en
el mundo. 8. Desarrollar la capacidad de abstracción y el pensamiento crítico
mediante la formación en filosofía, lógica y matemáticas, con métodos
innovadores que privilegien el aprendizaje desde la cotidianidad y la
experiencia. 9. Desarrollar un proceso educativo que eleve la conciencia para
alcanzar la suprema felicidad social a través de una estructura socioeconómica
incluyente un nuevo modelo productivo social, humanista y endógeno. A partir de
los fines establecidos en nuestra Ley Orgánica de Educación, el Ministerio del
Poder Popular para la Educación como ente rector y orientador de la educación
presenta para este nuevo año escolar 2016-2017, REFERENTES ÉTICOS Y PROCESOS
INDISPENSABLES para todos los niveles y modalidades, como punto de partida para
LA DISCUSIÓN, REFLEXIÓN, AUTOEVALUACIÓN Y COMPROMISOS para el logro de los
propósitos e intencionalidades pedagógicas en este año escolar. Estos
referentes éticos y procesos indispensables surgen de la sistematización de 17
años de revolución educativa, con sus logros y sus dificultades. Surgen de los
principios fundamentales establecidos por el pueblo en la CRBV para la
refundación de la República y de los fines de la educación expresados en la LOE
(2009). Como su nombre lo indica, se convierten en referente para que cada
escuela evalúe y valore lo que viene haciendo, tanto en el aula, como en cada
10
espacio donde se comparte vida.
Por ejemplo, el primer referente, Educar con, por y para todos y todas, ¿Es
esta una práctica cotidiana en nuestra escuela?, ¿se incluyen a todos y a todas
en nuestras experiencias cotidianas o hay exclusión y discriminación?. En el
segundo referente ético y proceso indispensable, Educar en, por y para la
ciudadanía participativa y protagónica, ¿La práctica diaria en nuestras aulas
de clase es autocrática o democrática?, en la práctica directiva, ¿propiciamos
la participación protagónica o tomamos decisiones de manera discrecional?,
¿formamos a nuestros niños y nuestras niñas para ser ciudadanos y ciudadanas
que se integran de manera protagónica en la solución de las problemáticas de su
comunidad?.
No son referentes para ser
estudiados con pizarra y marcador, no son materias ni asignaturas, SON PARA VIVIRLOS, PARA EXPERIMENTARLOS,
para darle sentido y perspectiva a lo que hacemos, más allá de una rutina
mecánica, queremos abrir espacios de reflexión acerca de nuestra práctica
pedagógica y de cómo logramos realmente alcanzar las finalidades educativas.
Desde una lectura crítica de un mundo cada día más complejo, invitamos a todos
y a todas a reflexionar acerca de la escuela misma y su razón de ser en ese
mundo complejo, sus retos y sus tremendas responsabilidades, nada parecidas a
décadas y siglos atrás. Es un proceso de transformación curricular desde lo
contemporáneo y desde lo necesario para una patria productiva, una patria de
convivencia y de solidaridad, una patria que se reconoce desde sus raíces e
interactúa con las demás patrias desde la convivencia, el respeto y la
autodeterminación de los pueblos. Repensar la escuela, revalorizarla con otra
perspectiva más allá de “retener” contenidos estériles y sacar notas o de
aprender respuestas únicas, lógicas dicotómicas y generación de pensamiento
simple. Por ello, es necesario que cada maestro y cada maestra de cualquier
nivel o modalidad conozca y valore los fines de la educación y los referentes
éticos y procesos indispensables. Cada uno contiene en sí mismo retos en los
propósitos escolares y en el logro de la formación integral de los niños,
niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas.
Los referentes éticos y procesos indispensables
La Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela afirma como valores superiores del Estado,
determinantes de su ordenamiento jurídico y su actuación: la vida, la libertad,
la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad
social y, en general, la preeminencia de los derechos humanos, la ética y el
pluralismo político. Estos valores se traducen en fines esenciales: la defensa
y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio
democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y
amante de la paz, la promoción de la prosperidad y el bienestar del pueblo.
Tales valores y fines refieren a lo que somos, pero sobre todo a lo que
queremos ser como sociedad; no en balde, se plantean como procesos
fundamentales para alcanzar estos fines a la educación y el trabajo.
El cambio en nuestras maneras de
vivir en común, la garantía de prácticas sociales de respeto, libertad,
igualdad, justicia y convivencia, debe partir de la vivencia consciente de
nuevas relaciones. No puede aprenderse a participar sino es participando, a
convivir sino es conviviendo. Para prefigurar una sociedad justa y amante de la
paz, necesitamos una escuela justa y amante la paz en todas sus dimensiones: en
la clase, los recesos, la organización, las rutinas, así como en las relaciones
entre estudiantes y docentes, entre docentes, con el personal directivo, con
las familias
11
y la comunidad. Este punto de
vista es ampliamente compartido, como se desprende de la Consulta Nacional por
la Calidad Educativa, cuyo informe señala que: “... todos los sectores de la
sociedad reconocen que la escuela pudiera ser un lugar agradable y tranquilo,
donde los y las estudiantes se sientan cómodos y queridos, donde aprendan
valores para la vida”, aunque como también recoge el informe: “las personas encuestadas
señalan que muchas veces no es así”. La Consulta indica el reconocimiento del
esfuerzo de muchos y muchas docentes por hacer de la escuela una experiencia
gratificante y formadora, sin embargo se plantea la preocupación de familias y
consejos educativos ante la actitud pasiva e indiferente de muchas escuelas y
docentes que parecen ignorar los problemas de las y los estudiantes, sus
familias y su entorno.
Esta idea de “aprender desde...”
apunta a que las y los estudiantes tengan en la escuela la oportunidad de estar
inmersos en los principios y valores, a que tengan la oportunidad de
experimentarlos, de vivirlos y reflexionar sobre ellos. Se trata más, por
ejemplo, de vivir y aprender en un ambiente de respeto y aceptación mutua, que
de dar una clase o impartir una lección sobre el respeto y la aceptación mutua.
Dicho de otra manera, el tratamiento que se plantea en esta propuesta de
proceso de transformación curricular es que los principios y referentes de vida
sean integrados como experiencias indispensables que contribuyan a la
construcción reflexiva de un sistema de valores asumido como guía para la
acción en las diversas facetas de la vida.
Sobre los referentes éticos y procesos indispensables es necesario
destacar que:
1. Abarcan todos los aspectos de
la vida del plantel, deben estar integrados a la organización y el
funcionamiento, a la forma en que se trabajan las áreas, a las rutinas, a las
actividades comunes y a las relaciones entre todos los que participan en la
vida escolar: docentes, directivos, estudiantes, trabajadores administrativos y
obreros, familias, comunidad. 2. Deben integrarse como dimensiones permanentes,
prolongadas en el tiempo. No es que a veces seamos solidarios o que esta semana
apreciaremos la diversidad humana, sino que la cultura escolar esté impregnada
de práctica solidaria y de aprecio a la diversidad humana. 3. Deben ser
evaluados en el conjunto de los procesos escolares y las prácticas pedagógicas
y no sólo en el comportamiento de las y los estudiantes. En todos los centros
educativos de todos los niveles y modalidades deben preguntarse continuamente
si las actividades escolares son o no (o hasta qué punto son) coherentes con
los referentes éticos y los procesos indispensables. 4. Tienen que ser objeto
de reflexión de todos quienes participan en la vida escolar y, por tanto,
tienen que propiciarse las oportunidades para que individual y colectivamente
todas y todos tengan la oportunidad de elaborar y compartir sus propias
aproximaciones sobre estos referentes, ampliándolos e interpretándolos, para
que puedan servir de guía ética efectiva para pensar y autoevaluar sus
acciones. 5. Deben tener una traducción en cada área de formación, tanto en
forma de recomendaciones metodológicas como en los contenidos. En este sentido son
transversales a todo el currículo. Para la selección de los referentes éticos y
procesos indispensables, tomamos como base los principios constitucionales (la
prefiguración de la sociedad que queremos ser), enfatizando los elementos
educativos implícitos en ellos:
12
1. Educar con, por y para todas y
todos 2. Educar en, por y para la ciudadanía participativa y protagónica 3.
Educar en, por y para el amor a la Patria, la soberanía y la autodeterminación
4. Educar en, por y para el amor, el respeto y la afirmación de la condición
humana 5. Educar en, por y para la interculturalidad y la valoración de la
diversidad 6. Educar en, por y para el trabajo productivo y la transformación
social 7. Educar en, por y para la preservación de la vida en el planeta 8. Educar
en, por y para la libertad y una visión crítica del mundo 9. Educar en, por y
para la curiosidad y la investigación 1. Educar con, por y para todas y todos
Una educación que nos incluya a todas y todos debe ser el primer consenso de la
escuela y de la sociedad en su conjunto. Es nuestro deber (el de todas y todos)
garantizar que sea una educación con todas y todos, que nadie se nos quede
afuera. Es inmensa la diferencia para la vida de un niño, una niña, un o una
adolescente, un o una joven, y para la sociedad toda, que esté dentro o fuera
de una escuela o de un liceo o de una escuela técnica. No se trata de
garantizar solamente el acceso a la educación, es necesario desarrollar
prácticas educativas y condiciones para que el o la estudiante permanezca y
aprenda. Una educación inclusiva no discrimina a ningún o ninguna estudiante ni
lo etiqueta. A ninguno de nosotros o nosotras le puede ser indiferente que un
estudiante no asista a clase. La práctica solidaria y afectuosa requiere que
cada ausencia genere inmediatamente la pregunta y ¿por qué no vino?, que entre
estudiantes, docentes y familias ayudemos a poner al día al que se enfermó, a
reconectarse con el liceo al que decayó en su interés, a buscar al que “anda
perdío por ahí”, “Vamos por ellos y por ellas”, expresó siempre el Presidente
Hugo Chávez. La escuela excluye cuando “no enseña nada” o lo que enseña no
tiene sentido o cuando la dejadez permite que haya estudiantes sin clases o
corriendo por el pasillo a la hora del laboratorio. Esto nos obliga a que la
educación tenga sentido para cada uno y cada una de sus estudiantes, a buscar
activamente sus intereses y explorar en ellos y en ellas la curiosidad, la
necesidad de aprender que portan como condición humana. Es para todas y todos y
eso exige atender más al que amenaza con descolgarse, a la que no entendemos
por qué está cada vez más desinteresada. La escuela o el liceo excluyente
parecen estar hechos para unos pocos o pocas, para los que aprenden rápido,
para los y las que están familiarizados con la cultura escolar, para los y las
que cuentan con apoyo familiar para hacer las tareas o para el que “trajo el
uniforme como dice la norma”. La paradoja es que precisamente los tildados y
las tildadas como los y las que “no sirven para estudiar”, los que prefieren
otras cosas y son más atraídos por la calle, son los que reclaman y ameritan
mayor atención y cuidado. Es por esto que la educación no es selectiva sino UN
DERECHO HUMANO. Por ejemplo, los hechos de violencia intraescolar más
reportados por las y los adolescentes en un estudio realizado en la República
Bolivariana de Venezuela por UNICEF y el MPPE en el 2010, son precisamente las
burlas, exclusiones y las peleas entre estudiantes y con estudiantes de otros
liceos. Las y los estudiantes de primer año son de los más sensibles a las
posibilidades de exclusión. En ellos y ellas se combinan los retos y traumas de
la pubertad con el cambio de la escuela de una sola maestra o de un solo
maestro al liceo con varios profesores y profesoras (hasta el cambio de
denominación de maestro a profesor les afecta) y materias, de ser los más
grandes de la escuela a convertirse en los más pequeños del liceo. Esto los y
las convierte en
13
fáciles blancos y por tanto
requerimos de un esfuerzo por integrarlos e integrarlas y para que los y las
grandes se conviertan más bien en protectores de los más pequeños y las más
pequeñas, este es uno de los sentidos de la recién estrenada figura del
preparador y la preparadora estudiantil. 2. Educar en, por y para la ciudadanía
participativa y protagónica Conforme a su Exposición de Motivos, nuestra
Constitución establece “... la consagración amplia del derecho a la
participación en los asuntos públicos de todos los ciudadanos y ciudadanas,
(...). Este derecho no queda circunscrito al derecho al sufragio, ya que es
entendido en un sentido amplio, abarcando la participación en el proceso de
formación, ejecución y control de la gestión pública (...). Concebir la gestión
pública como un proceso en el cual se establece una comunicación fluida entre
gobernantes y pueblo, implica modificar la orientación de las relaciones entre
el Estado y la sociedad, para devolverle a esta última su legítimo
protagonismo. Es precisamente este principio consagrado como derecho, el que
orienta el Capítulo referido a los derechos políticos”. La democracia
participativa y protagónica es el corazón del nuevo ordenamiento político
venezolano, que no solamente plantea la participación como derecho sino también
como deber. La conocida sentencia de Simón Rodríguez: Formar republicanos para
tener República, se puede traducir hoy en formar una ciudadanía participativa y
protagónica para tener una auténtica democracia en la que el pueblo sea el
soberano. La participación, que es un componente indispensable de la ciudadanía
efectiva, se confronta con las prácticas instituidas durante años que reducen
la democracia al sufragio y dejan a los gobernantes electos y electas la
conducción de la sociedad, desprendiéndose de sus electores y electoras y
respondiendo a los intereses de las minorías que detentan el poder económico.
La construcción de ciudadanía tiene que ser asunto de todos los días y la
educación juega un papel crucial en este proceso de tránsito de la cultura de
la representatividad hacia la del protagonismo verdadero. Como todos los demás
referentes éticos y procesos indispensables, la educación en, por y para la
ciudadanía participativa y protagónica debe expresarse en todos los ámbitos de
la vida de las escuelas y liceos. En la toma de decisiones consensuadas y consultadas,
en la definición del proyecto educativo integral comunitario, en las aulas, en
la preparación de actividades comunes, en la organización de los diferentes
grupos que integran la comunidad educativa, en la formulación, ejecución y
evaluación de proyectos. Las formas de participación en las escuelas deben
multiplicarse pues todos no están dispuestos o no les es posible participar de
la misma manera. Unos o unas preferirán integrarse a actividades deportivas,
artísticas, ambientales o comunitarias, otros u otras preferirán integrarse a
las comisiones del Consejo Educativo, al mantenimiento de las edificaciones o a
la realización de actividades especiales como visitas a un museo, excursiones o
celebraciones. Por ejemplo, los grupos estables pueden integrar a las y los
estudiantes, a sus familiares, personal administrativo, obrero, docentes y
otros integrantes de la comunidad. Que las instituciones educativas sean
espacios de formación de una ciudadanía participativa y protagónica, exige el
desarrollo de una cultura de la participación, que a su vez implica una
identificación ética con la necesidad de que existan decisiones compartidas, la
práctica del diálogo permanente, la valoración de la diversidad humana y de la
pluralidad de perspectivas, la receptividad y la aceptación de los y las demás,
la multiplicación de los espacios y formas de participación, la naturalidad de
los conflictos y el cultivo de formas apropiadas de procesarlos y resolverlos.
14
La educación en, por y para la
ciudadanía participativa y protagónica exige que todos y todas conversemos
acerca de ella y vayamos llenándola de significado y de práctica real, ser
receptivos a la pregunta impertinente, preferir combinar el trabajo en grupos y
la reflexión individual más que el discurso del o la docente, generar e invitar
al debate y la curiosidad, diseñar para que las y los estudiantes propongan y
dirijan actividades y proyectos, aceptar que la educación no consiste en
presentar y aprenderse respuestas únicas, hacer que el aula crezca y se
desborde en la actividad comunitaria y en contacto con otros paisajes y
personajes más allá de la escuela. 3. Educar en, por y para el amor a la
Patria, la soberanía y la autodeterminación Nuestra Constitución cuando abre un
capítulo sobre los deberes es muy concisa, establece sólo 6 artículos y el
primero de ellos, el artículo 130, señala que: “Los venezolanos y las
venezolanas tienen el deber de honrar y defender la patria, sus símbolos y
valores culturales; resguardar y proteger la soberanía, la nacionalidad, la
integridad territorial, la autodeterminación y los intereses de la nación”. La
soberanía y la autodeterminación son principios que fundamentan la relación
entre los estados, conforme a la declaración fundacional de las Naciones
Unidas. Estos principios, su historia y significado, así como la historia que
hemos recorrido y construido como pueblo para hacernos independientes, tienen
que ser tema de estudio indispensable. Pero cuando hablamos de la Patria y del
amor a la Patria como referente ético y como práctica cotidiana en nuestras
escuelas nos referimos a un asunto más amplio, que se sustenta en el
conocimiento pero no se restringe a él. La Patria para nosotros es la
reivindicación de nosotros mismos y de nosotras mismas, en nuestro paisaje, nuestra
identidad, con nuestra historia y nuestra diversidad como pueblo. La Patria
existe en la dignidad de ser venezolanas y venezolanos, en la fuerza ética que
nos permite pararnos sobre nuestros propios pies, para abrirnos a la
convivencia y la solidaridad con otros pueblos y enfrentar a quienes han
pretendido, pretenden o pretendan sojuzgarnos o dominarnos. Es este sentimiento
de Patria el que se ha forjado en la lucha contra los conquistadores que
intentaron borrarnos en nuestra existencia como pueblo, con nuestra relación
con esta tierra, con nuestras emociones, espiritualidad, formas de expresión,
referencias y recuerdos. Es esta emoción patriótica la que encontramos en cada
despertar de nuestro pueblo, contra el adormecimiento de la conciencia, la desmemoria
y el cinismo egoísta al que han intentado condenarnos las minorías poderosas y
desnacionalizadas, esas que han intentado subsumirnos en la imitación y la
desvalorarización de lo nuestro. La patria es la conciencia y la memoria e
igualmente la que hay que reinventar todos los días para no errar en el camino
de ser libres. Nuestra educación ha de cultivar el sentimiento patrio en toda
su nobleza y su dignidad. Nuestro patriotismo no es xenófobo, no discrimina al
extranjero o a lo extranjero, se siente parte del mundo y en solidaridad con
todo el género humano. Nuestro patriotismo está muy lejos del chauvinismo, esa
no es la historia nuestra, la de los hijos e hijas de Bolívar para quien la
Patria es América, quien se identificó siempre con lo grande, lo hermoso, lo
bueno. Hoy, es impostergable que sigamos fortaleciendo nuestra consciencia y
nuestro espíritu en rebeldía...” En todas las instituciones educativas, el amor
a la Patria tiene que ser cosa de todos los días. Manifestarse en el lugar y el
tiempo destacados para rendir honor a los símbolos patrios, en el conocimiento
y el afecto por lo venezolano y por las venezolanas y los venezolanos (no
olvidemos que un estudiante de un liceo puede graduarse y no saber quién era
ese que le dio su nombre al plantel o la subvaloración de los bustos, imágenes
o recordatorios que existen en los centros educativos y a veces, lejos de ser
honrados se convierten en depósitos de basura). Pero
15
también en el estudio permanente
de lo que nos enaltece y también de lo que nos deshonra, del conocimiento
próximo de los lugares que nos hacen sentir orgullosos, de la cercanía con los
hechos y los personajes que han demostrado con sus vidas lo que quiere decir
pasión patria. No es definitivamente una cuestión sólo de las clases de
historia, es forjar la ciudadanía de los que hoy están tomando en sus manos y
moldeando el destino de Venezuela. Parte fundamental del tema ético de la
soberanía es reivindicarnos a nosotros mismos y a nosotras mismas y fomentar el
arraigo. Los conquistadores europeos llegaron a estas tierras expulsando a sus
habitantes de sus espacios de vida, exterminándolos o condenándolos a vivir, a
creer y a pensar como el colonizador, intentando que se olvidaran de sí mismos.
Los herederos inmediatos de la conquista continuaron con el despojo y
sustrajeron de su tierra a decenas de miles de africanas y africanos para
reducirlos a la condición de esclavizados y esclavizadas. La república
secuestrada por la oligarquía siguió tomando la tierra como posesión y empujando
a sus gentes al desarraigo. No ha sido fácil la relación del pueblo venezolano
con su tierra, expropiada de múltiples maneras. Es una historia de menosprecio,
maltratos y negaciones, de desprecio de la población mayoritaria por los grupos
dominantes, que han parecido estar aquí de paso, apenas buscando como
apropiarse de lo que se pueda, “soportando el país”, con la imaginación y las
expectativas de vivir en otras tierras más “civilizadas”. Como dice el maestro
Arnaldo Esté: “Esta historia nos ha dejado el descreimiento de nosotros mismos
con una menguada dignidad que disminuye la poca importancia que nos damos y que
le damos al ámbito donde vivimos”. Este referente ético y proceso fundamental
nos debe permitir reencontrarnos con nosotros mismos, con nuestros acervos,
nuestra identidad como ser humano y como pueblo, nuestra formidable diversidad
humana y nuestra tierra, es parte fundamental de la reconstrucción de nuestra
subjetividad como pueblo capaz de asumir nuestro propio destino, desde nosotros
y en diálogo con el mundo. Esta tarea tiene que formar parte de la cotidianidad
de nuestras escuelas, liceos y escuelas técnicas, pasa, en primer lugar, por la
valoración de los protagonistas de la acción educativa, tanto de las y los
docentes como de las y los estudiantes y sus familias, de re-conocer y
re-valorar sus circunstancias, sus cuentos, sus formas de hablar, las
comunidades donde viven. De centrar nuestra atención en lo cercano, conocer
nuestras plantas y nuestros animales, valorar nuestros problemas. El arraigo se
desarrolla en la acción. No son sólo cuentos o visitas, es participación
efectiva en la vida de la comunidad, en cada acto cívico que es necesario
revalorizar, en cada reunión con madres, padres y representantes y su
reconocimiento como parte las familias y comunidades de nuestros y nuestras
estudiantes. El respeto, conocimiento y reconocimiento de cada ser humano en su
identidad, le da el piso fundamental para la convivencia y la soberanía.
4. Educar en, por y para el amor, el respeto y la afirmación de la
condición humana
En el mundo existen muchas formas
de injusticias que derivan en exclusiones, sufrimientos, agresiones,
violencias, guerras y caos. La explotación de un ser humano por otro ser
humano, la división social del trabajo con sus jerarquías implícitas, la
explotación y violencia hacia la mujer, la explotación y violencia hacia los
niños y las niñas, mancillar la dignidad de pueblos, religiones, sexos
diversos, maltratos físico y verbales hacia el o la diferente, la
descalificación, estigmatización y ridiculización de seres humanos fundamentado
en estereotipos impuestos por el modelo social mercantilista y publicitario, de
bonitos, feos, exitosos, fracasados, populares, no populares. Entre tantos
estereotipos creados, en una sociedad así, se genera un “sálvese quien pueda”
que difícilmente permita el respeto, el amor, la paz y la convivencia.
16
Las instituciones educativas no
escapan a esta realidad de intolerancia social, individualismo y competencia,
reforzada por los medios de comunicación masivos a nivel mundial, no siendo
fortuito el aumento de la agresión y la violencia entre estudiantes e inclusive
entre los adultos y las adultas. Las instituciones educativas son espacios de
referencia para la afirmación de la condición humana. Todos los educadores y
todas las educadoras se encuentran día a día con personas en proceso de
desarrollo y por ende, de formación. Amar, aprender, crear, descubrir,
respetar, socializar, disfrutar, leer, escribir, estudiar, producir, entre
otras, son capacidades humanas. Nuestros y nuestras estudiantes son seres
humanos por lo que tienen el potencial creador del ser humano. Ningún o ninguna
docente debe dudar de esta condición y debe ser garante de crear las
condiciones y propiciar en el día a día, que estas capacidades se descubran y
se potencien. Por último, queremos resaltar que el amor y el respeto es posible
en el proceso de reconocimiento de sí mismo y de sí misma y en la convivencia
con los y las demás. Como dice Humberto Maturana: “Nos interesa la educación de
nuestros niños porque en definitiva queremos que sean felices. La felicidad
está en la armonía del vivir con un sentido en el respeto por sí mismo y por el
otro. Se trata de crear espacio para la felicidad, para la realización mutua,
en el respeto y la colaboración. Esa deberá ser la tarea más importante de la
educación: crear convivencia en la confianza, vivir los valores, y hablar de
ellos cuando sea estrictamente necesario. ¿Qué pasa con los valores? Los
valores no hay que enseñarlos, hay que vivirlos. Idealmente, no deberíamos
hablar de valores, sino simplemente vivirlos y testimoniarlos. De los valores
se habla cuando no se viven, cuando están ausentes, cuando se experimenta su
violación. En el acto de respeto al otro, al niño, al joven de nuestras
escuelas, se descubre que lo único que tienen es su propia historia, una
historia que es preciso respetar y promover”. Para lograr alcanzar una sociedad
justa y amante de la paz, tenemos el reto de construir y formar una ciudadanía
para la convivencia desde el hogar, desde la familia, desde la comunidad y
desde la escuela a partir de un modelo educativo en, por y para la defensa y el
desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, educar en, por y para el
amor, el respeto y la afirmación de la condición humana de todos y todas. 5.
Educar en, por y para la interculturalidad y la valoración de la diversidad Valorar
la diversidad inicia necesariamente por que cada estudiante valore su propia
existencia, como ser humano, como ser único y a la vez como parte de una
familia, de una comunidad y de una cultura. La identidad y la
intraculturalidad, es decir, reconocerse tanto individual como colectivamente,
da el arraigo y la dignidad que cada persona y cada pueblo requiere para
relacionarse de manera intercultural y respetuosa con los otros y con las
otras. Es un referente ético que la escuela debe promover en su día a día,
todos y todas debemos formar parte de un proceso de conocimiento,
reconocimiento y respeto por todo lo diverso: diversidad de género, de edades,
cultural, religiosa, funcional, sexual, diversidad de fisonomías, de
pensamientos, inclinaciones, talentos, sentimientos. La verdadera convivencia
parte del reconocimiento de la diversidad. Las escuelas deben convertirse en
referentes permanentes del respeto y práctica de esta convivencia. La armonía y
paz social, la justicia en toma de decisiones y acciones, la mayoría de las
veces está relacionada a este principio fundamental del respeto a la
diversidad. La pedagogía del amor y del ejemplo que debe prevalecer en las
prácticas cotidianas en nuestros liceos y escuelas técnicas, debe propiciar y
promover el ejercicio de una convivencia en la diversidad.
17
Por otro lado, la
interculturalidad como principio en el sistema educativo, no es exclusiva para
el reconocimiento de nuestros pueblos indígenas y afrovenezolanos. Por lo
general, se relaciona este principio a los mismos. Cuando la CRBV, establece el
reconocimiento de que somos una sociedad multiétnica y pluricultural, el
principio de la interculturalidad aplica en la práctica educativa en todos los
planteles de todos los niveles y modalidades y en todos los contextos del país.
La República Bolivariana de Venezuela está formada por culturas del mestizaje
múltiple (andinos, orientales, centrales, costeños, entre otros), de la
afrovenezolanidad, de los pueblos indígenas, culturas urbanas, culturas del
campo, personas provenientes de todas partes del mundo y sus hijos e hijas
(Italia, Portugal, Siria, China, Grecia, Líbano, Cuba, Colombia, Perú, entre
otros). Seres humanos con acervo diverso y con inmensos aportes culturales que
constituyen hoy nuestra venezolanidad. La interculturalidad como principio de
relación humana pasa por reconocerse de igual a igual, sin culturas
“superiores” o culturas “inferiores”. Intercambiar saberes, conocimientos,
tecnologías, formas organizativas, sin imposiciones ni dominación. ASÍ DEBE SER
LA ESCUELA. Todas las instituciones educativas de todos los niveles y
modalidades en todos los contextos del país, deben ser espacios de
interculturalidad y valoración de la diversidad, en los cuales los y las
estudiantes encuentren inclusión, justicia, respeto y reconocimiento como ser
humano pleno y perteneciente a una familia, a una comunidad y a una cultura, y
a su vez, se les inculque este respeto y reconocimiento de los otros y de las
otras desde la práctica de la convivencia en diversidad. 6. Educar en, por y
para el trabajo productivo y la transformación social Las palabras del maestro
Luis Beltrán Prieto, escritas en 1952, sirven para introducir el tema: “... la
escuela debe encargarse de hacer esa iniciación en el trabajo socialmente útil,
que ha de realizar el niño para su completo aprendizaje. No ha de pretender la
escuela obreros capacitados para entregarlos a la explotación, sino educar al
hombre para que pueda valerse en las diferentes situaciones que le plantea la
vida. No puede ser función de la escuela, como la pretendía Kerchensteiner,
hacer buenos artesanos y circunscribir el aprendizaje de las artes a las clases
proletarias, ya que lo que se quiere es convertir el trabajo en un método de
educación, por medio del cual los alumnos, cualquiera que sea su condición
social, puedan participar en el proceso social de la producción para
interpretarlo como fenómeno y para sentirlo como necesidad. (...) El trabajo
así considerado tiene un sentido de totalidad. Ya no es el trabajo manual aislado,
de proyecciones limitadas, sino un trabajo de amplia colaboración en el cual se
suprime la competencia entre alumnos y en el que predominan el deseo de
perfeccionamiento espiritual y de ayuda a los demás. La escuela, (...) está
perdiendo su carácter individualista de competencia entre los que más saben y
los que saben menos, entre los de fácil memorización y los tardos en memorizar
una lección, para convertirse en una comunidad donde el trabajo unifica y
solidariza, porque el esfuerzo en común crea lazos de compañerismo, que luego
se prolongarán en la vida, para convertir a nuestro mundo estrecho de egoísmos
en un mundo mejor, más humanizado, si no más humano. Organizada así la escuela
sobre una base social, no podrá ser considerada como una grave falta el que
unos niños ayuden a los otros, ni se auspiciará la cooperación clandestina y un
tanto artificial. El trabajo activo del alumno no puede ser ya una disciplina
más dentro del programa escolar, sino el principio que norma toda la vida de la
escuela. En vez de insertarse en el programa, el trabajo regula la labor
docente, dando nacimiento al método de aprendizaje que es un método orgánico,
totalizador de energía y de amplio sentido social”.
18
Este referente cobra una fuerza
fundamental en un momento histórico en el cual la República Bolivariana de
Venezuela decide asumir con compromiso y convicción la superación de una
economía centrada en la renta petrolera. Se requiere de una escuela que forme
desde el trabajo, desde la creación y la producción. Que cada experiencia
educativa se viva de manera teórico-práctica y forje en el espíritu de cada
estudiante el sentimiento digno del trabajo liberador.
7. Educar en, por y para la preservación de la vida en el planeta
El quinto objetivo histórico del
Plan de la Patria es preservar la vida en el planeta y salvar la especie
humana. Esto se traduce en la necesidad de construir un modelo económico,
social y formas de vida, basadas en una relación armónica entre el ser humano y
la naturaleza, respetando sus procesos y ciclos. La destrucción del planeta a
manos de la voracidad de un sistema de producción y consumo que privilegia las
ganancias y la mercantilización y que ha derivado en el cambio climático, la
contaminación de las fuentes de agua, la depredación de los recursos, entre
otros fenómenos contemporáneos, dan cuenta de una situación global que pone en
peligro la continuidad de la vida en el planeta y particularmente la
continuidad de la especie humana. La preservación de la vida y de la especie
exige una nueva visión de desarrollo que cuestione esos modelos de producción y
consumo, que considere la superación de las desigualdades y que plantee cambios
económicos, sociales y culturales. Esta necesidad de una visión integral para
preservar la vida es ampliamente aceptada. La UNESCO, al definir Desarrollo
Sostenible señala que se trata de “... una visión del desarrollo que abarca el
respeto por todas las formas de vida — humana y no humana — (...), al mismo
tiempo que integra preocupaciones como la reducción de la pobreza, la igualdad
de género, los derechos humanos, la educación para todos, la salud, la
seguridad humana y el diálogo intercultural”. Es necesario entonces
instituciones educativas que formen en, por y para una conciencia de la
vulnerabilidad del planeta, formar en principios, valores y prácticas para
abordar abordar los problemas políticos, sociales, económicos, culturales y
ambientales a que nos enfrentamos en el siglo XXI con una perspectiva desde
cada lugar con visión de conjunto planetaria.
8. Educar en, por y para la
libertad y una visión crítica del mundo Vivir en libertad ha sido y es la mayor
lucha de los seres humanos a través de la Historia de los pueblos. Mientras
existan pueblos que se consideran superiores a otros, para esclavizarlos, subyugarlos,
explotarlos y oprimirlos; será menester formar en, por y para la libertad,
tanto individual como colectiva. La República Bolivariana de Venezuela es
soberana y libre, gracias a las luchas emancipadoras de nuestros antepasados,
quienes sacrificaron sus vidas por la libertad de los pueblos oprimidos. Por
eso es indispensable educar en libertad, por la libertad y para la libertad.
Los espacios escolares deben ser prácticas permanentes de la vida en libertad,
no refiriéndonos al libertinaje entendido como la actitud irrespetuosa de la
ley, la ética, la moral o de quien abusa de su propia libertad con menoscabo de
la de los y las demás. Tal como lo establece el artículo 20 de la CRBV, “toda
persona tiene derecho al libre desenvolvimiento de su personalidad sin más
limitaciones que las que derivan del derecho de las demás y del orden público y
social”. Nos referimos entonces al derecho de toda persona a vivir en libertad
y en sociedad. A vivir en comunidad, con respeto y convivencia con los y las
demás y con el ambiente.
19
En este sentido, la formación con
visión crítica del mundo es igualmente indispensable para la vida en libertad,
la conciencia de los procesos a escala local, regional, nacional e
internacional que permita una visión de conjunto de lo político, social,
económico, cultural y ambiental actuando desde lo local con visión global.
Vivir en libertad es vivir con conciencia, es defender la soberanía y la
autodeterminación de los pueblos, es vivir con conocimiento, conciencia y
convicción de jamás permitir la explotación de seres humanos por otros seres
humanos, es defender el equilibrio ecológico y luchar por la dignidad de los
pueblos. Libertad es dignidad. Educar en, por y para la libertad y una visión
crítica del mundo es un referente ético y un proceso indispensable en el aula,
en la escuela y en la comunidad, estimulando los por qués de las cosas, más
allá de lo memorístico y libresco, superando el conocimiento impuesto como
verdad absoluta, promoviendo la discusión y el debate y respetando las
corrientes del pensamiento pero con sentido crítico y radical contra
pensamientos discriminatorios, de desigualdad y de exclusión, como por ejemplo
el racismo que siendo una corriente del pensamiento atenta contra todo el
derecho de libertad, igualdad e inclusión. 9. Educar en, por y para la
curiosidad y la investigación En el artículo 14 de la LOE (2009), se establece
claramente lo que es la Educación en la República Bolivariana de Venezuela, en
el mismo se plantea como eje de la didáctica, la investigación, la creatividad
y la innovación. Tomando en cuenta la diversidad de intereses y necesidades de
los y las estudiantes. Esto se fortalece en la bandera de la PEDAGOGÍA DEL
AMOR, EL EJEMPLO Y LA CURIOSIDAD surgida del mandato popular. Hoy, se considera
como un referente ético y proceso indispensable que rompe con la educación
bancaria y opresora que tanto cuestionó el maestro Paulo Freire. Siendo el
último referente ético y proceso indispensable que se está planteando para la
formación integral de nuestros y nuestras estudiantes, queremos resaltar que
recoge un aspecto fundamental para el logro de los demás: la actitud. Nuestros
liceos deben estar llenos de actitud investigativa, con motivación, entusiasmo
por aprender, indagar, estudiar, curiosear, producir, crear, disfrutar los
nuevos conocimientos. Los educadores y las educadoras, como verdaderos
pedagogos y verdaderas pedagogas, deben propiciar y crear condíciones,
estrategias y espacios para la creación y la innovación. Las escuelas forman
parte de las comunidades (no son algo separado de ellas), por lo que es
necesario conocer, reconocer e indagar los contextos: político, social,
económico, geohistórico, cultural y ambiental donde hace vida la población
estudiantil, sus familias y los trabajadores y las trabajadoras de la
institución. Sensibilizarse y comprometerse con las necesidades de la
comunidad, con espíritu comunitario, con voluntad, compromiso y disposición
para la investigación y promoviendo la curiosidad, superando la educación en la
cual se mutila esta (“no invente, no sea inventor, quién te mandó a hacer eso,
cuándo no tu, eso no fue lo que pedí que hicieras, si eres preguntón, haz solo
lo que estoy pidiendo”, entre otros).
Todos estos referentes éticos y
procesos indispensables son una invitación pedagógica para otra escuela, para
otro liceo. Una escuela y un liceo que despierten al ser humano en toda su
condición, no solo a estudiantes, sino a toda la comunidad educativa, docentes,
obreros, obreras, secretarias, secretarios, familias, madres cocineras, padres
cocineros, voceros y voceras de los Consejos Educativos, de Consejos Comunales,
juntos y juntas aprendiendo, estudiando, organizando, conviviendo, siendo
corresponsables de la construcción de un mundo mejor desde la práctica educativa.
20
Vinculación del estudio con el
trabajo, la educación con la creación y la producción. Formar produciendo,
producir formando QUEREMOS ENFATIZAR: Históricamente ha prevalecido como
característica en el sistema educativo, la división social del trabajo con su
intencionalidad relacionada a las relaciones de producción capitalista y a su
vez, una característica propia de esta división social del trabajo es la
separación entre el trabajo intelectual y del trabajo manual. Este
“intelectualismo” ha creado en nuestra cultura escolar, menosprecio y hasta
mutilación del trabajo manual, traducido en la práctica en relaciones tales
como, docentes que expresan “yo no barro el salón, mi título no dice
barrendero”, mamás que reclaman “Yo mando a mi hijo a la escuela a estudiar, no
a sembrar”. Continuando con estas ilustraciones, por ejemplo en un salón se
despega la tapa de una mesasilla y el o la estudiante pasa el año con la
mesa-silla dañada hasta que deciden desincorporarla y pasa a formar parte del
“cementerio de mesas-sillas sin doliente”. ¿Es currículo haber reparado la
mesa–silla?, ¿Enseñar desidia es parte del currículo?, ¿De quién es la
responsabilidad de repararla?. Seguramente, la profesora o el profesor dijo “mi
título no dice herrero”, el obrero dijo “no me corresponde esa área” y así
sucesivamente se la fueron “peloteando”. Qué distinto hubiese sido que en el
mismo momento en que se desprendió la tabla, el o la docente conjuntamente con
su estudiante y la asesoría de un obrero o representante, se reparara la
mesa-silla dañada y el o la estudiante aprende a utilizar sus manos y a vivir
en no desidia, recuperando la esencia intelectual- manual de la educación, el
trabajo cooperativo, el valor del cuidado, la laboriosidad y la buena voluntad
para hacer las cosas. En el marco de estos planteamientos, queremos orientar en
las instituciones educativas de todos los niveles y modalidades a valorar el
trabajo en la educación. Centrar la práctica educativa en el trabajo y desde el
trabajo. En la educación inicial, por ejemplo, generar estrategias
privilegiando el juego y el desarrollo de la imaginación, sienta las bases para
la creación y la producción. Los primeros pasos del trabajo en la primera
infancia es el juego. Este planteamiento lo hacemos para resaltar la importancia
de ubicarse en el contexto y en el período de vida a abordar para lograr
pertinencia afectiva, cognitiva y sociocultural en lo que se está haciendo y
por qué se está haciendo. En este mismo orden de ideas, queremos orientar como
estrategias curriculares potentes para abrir camino a este enfoque, LOS GRUPOS
ESTABLES Y EL PTMS. Las experiencias que se han tenido con estas estrategias
han despertado en nuestras instituciones educativas un entusiasmo por la
creación, la recreación, la producción y el aprendizaje genuino.
Los grupos estables como
estrategia curricular transformadora “Al niño se le educa según su edad, su
genio, su inclinación, su temperamento” Simón Bolívar”
En el marco del aprender a
aprender, aprender haciendo, aprender produciendo, aprender a ser, aprender a
convivir y el disfrute del ser a plenitud, se plantea como estrategia la
creación de GRUPOS ESTABLES en nuestras instituciones educativas. Los grupos
estables están dirigidos al trabajo por grupos de interés, independientemente
de la sección y el año que se curse y variarán conforme a las características
de la localidad. Cada estudiante seleccionará el o los grupos estables en que
participará. Los distintos grupos estables
21
de los centros educativos se
pueden organizar según las potencialidades de los y las docentes que lo
organizan, las inclinaciones de nuestros y nuestras estudiantes, según las
potencialidades y prácticas del contexto, los recursos con que se cuenta en el
circuito educativo y la capacidad de los y las participantes para organizarse
en el logro de sus propósitos e intencionalidades (es parte del currículo). En
los grupos estables se potencia el aprendizaje desarrollando las
potencialidades humanas, es un proceso abierto, no tiene límites y este proceso
se potencia haciendo más que contemplando o escuchando las explicaciones de un
maestro o un profesor. Supone entonces la creación de un conjunto de
experiencias, aprendizajes, acciones, situaciones educativas que permitan el
desarrollo de estas potencialidades, en un proceso de ejercicio de nuestras
capacidades. Se pueden planificar y organizar grupos estables de cultura como
la danza, el canto, teatro, estudiantinas, artes plásticas, tejidos, cerámica,
murales, entre otras. De deportes y recreación, como futbolito, taekwondo,
basquetbol, voleibol, béisbol, softbol, juegos cooperativos, recreación, entre
otros. De acción científica, social y comunitaria: sociedad bolivariana,
robótica, centro de ciencias, promoción cultural, promoción deportiva,
promoción en salud, BRIGADISTAS INTEGRALES COMUNITARIOS, entre otros. De
participación en producción de bienes y servicios: Agroecología, tecnología
popular, dibujo, microempresa, contabilidad, herrería, carpintería, protocolo,
informática, gastronomía, entre otros. Los criterios más importantes que
queremos resaltar en la conformación de los grupos estables son: OCUPAR LA
MENTE: En los grupos estables los y las estudiantes aprenden. Debemos hacer
esfuerzos para desmontar la creencia de que solo con pizarra y marcador el o la
estudiante está aprendiendo. Cuando los y las estudiantes participan en teatro,
danza, futbolito, sociedad bolivariana, robótica, recreación, entre otros, está
incorporado a un proceso rico en aprendizaje. Nuestros y nuestras estudiantes
no disfrutan ni aprenden realmente, con largos dictados, memorizaciones sin
pertinencia (cognitiva, afectiva, sociocultural) y muchas veces “no le ven el
queso a la tostada” ya que no le encuentran aplicación de lo que estudian con
la realidad. Los grupos estables se convierten en una oportunidad de ocupar la
mente desde otro enfoque, otra lógica y otros métodos, asumiendo que los
conocimientos no se riñen con lo práctico, superando la separación entre el
trabajo manual y el trabajo intelectual. En cualquier grupo estable nuestros y
nuestras estudiantes ejercitan la lectura y la escritura, aprendiéndola de
verdad desde la práctica con sentido y motivadora, aprenden la matemática desde
su uso para resolver una situación específica en el montaje de una obra de
teatro, el estudio de una partitura musical o en la construcción de un cantero
para sembrar. Investigan, aplican y producen. OCUPAR LAS MANOS: Aprender
haciendo. Desde el trabajo práctico, desde la ejercitación, el ensayo y la
puesta en práctica de sus aprendizajes. En el academicismo y estudio teórico
característico del enfoque de escuela heredado, nuestros y nuestras estudiantes
NO CONCRETAN. Por ejemplo, el profesor o la profesora “cubrió un contenido”,
porque le “tocaba darlo”, los y las estudiantes lo estudiaron “porque va para
el examen y tiene nota”, pero al final, muchas veces no se aprendió. Se sacó la
nota por “retener” un tema (el tiempo necesario para obtener la calificación),
sin realmente haberlo aprendido. Es importante resaltar que a través de los
grupos estables se espera que cada estudiante participe de manera activa en las
actividades y realmente las haga, las practique, las aprenda y las concrete.
Por ejemplo, un grupo de teatro ensaya, organiza y presenta una obra de teatro.
22
OCUPAR EL CORAZÓN: Con amor todo,
sin amor nada. Que cada estudiante se incorpore a un grupo estable donde
disfrute, viva a plenitud lo que está haciendo. Por eso el énfasis en que se
organizan los grupos estables por grupos de interés. Que esté a gusto, no
obligado. Que se involucre con buena voluntad, compromiso y buena disposición.
Debemos estar atentos a brindar una variedad de grupos estables y crear las
condiciones para que todos y todas participen poniéndole corazón a lo que
hacen. LOS GRUPOS ESTABLES SE PUEDEN BRINDAR EN EL PLANTEL O EN EL CIRCUITO
EDUCATIVO. Por ejemplo, un grupo de estudiantes incorporándose y participando
en un grupo de danza del circuito educativo. CONVIVIR: Aprender en colectivo,
aprender conviviendo. Cada grupo estable que se brinda debe promover, propiciar
y practicar la convivencia, la solidaridad, el trabajo cooperativo, el apoyo
mutuo, la complementariedad, la colaboración y la aceptación mutua. Superar el
individualismo, la intolerancia, la competencia entre unos y unas y otros y
otras. LAS CREACIONES HUMANAS NO SE COMPITEN, SE COMPARTEN. Promover,
propiciar, favorecer y fortalecer espacios para el encuentro, el compartir, la
construcción colectiva, el intercambio y el aprendizaje mutuo desde el respeto
y reconocimiento de la diversidad y de las diferencias.
Énfasis en: • Si en una escuela
se abre un grupo estable donde no se ocupe la mente y/o no se ocupen las manos
y/o no se ocupe el corazón y/o no se conviva, NO ES UN GRUPO ESTABLE. Todos y
todas debemos ser garantes, en el marco de los referentes éticos y procesos
indispensables, de que estos criterios se cumplan. • EN LOS GRUPOS ESTABLES SE
ESPERA QUE HAGAMOS LOS MAYORES ESFUERZOS POR POTENCIAR TODAS LAS CAPACIDADES
HUMANAS, pensar, sentir, hacer, disfrutar, convivir, expresarse, construir,
crear, producir, participar, es decir, vivir a plenitud. Asimismo, la creación
y constitución de los grupos estables deben reivindicar la Identidad en sus
diferentes ámbitos: circuital, parroquial, municipal, regional y nacional,
considerando los acervos con que cuenta la comunidad. Apoyarse con el CIRCUITO
EDUCATIVO, si tienen un teatro, una plaza, pensar en el vecindario, escenarios,
patios, casas de la cultura, canchas, entre otros, destinado al desarrollo de
actividades que fortalezcan la formación integral y participación de niños,
niñas, adolescentes, jóvenes, adultas y adultos, propiciando el encuentro
comunitario. De igual manera caracterizar y reconocer lo local como fuente
principal del conocimiento del pueblo, como generador de cultura, que promueva
la participación, que potencien el desarrollo endógeno, agricultura sana,
preservación del ambiente, que reconozca las múltiples experiencias
participativas, que sirva como espacio para las diversas voces comunitarias,
expresen una visión integral de la cultura, las artes y las diversas
manifestaciones que expresan una práctica cooperativa, proporcione el encuentro
para la socialización, contribuya a difundir las experiencias comunitarias,
contribuya a la organización y a la formación de grupos para el trabajo cultural,
que promueva espacios formativos y organizativos para los niños, las niñas, los
y las adolescentes y jóvenes. • Apoyarse y valorar a los cultores y las
cultoras que han contribuido a fortalecer el arraigo en las comunidades, los
maestros y las maestras pueblo, personas comprometidas con prácticas
inclusivas, líderes comunitarios que favorezcan el ejercicio de la práctica
democrática en la participación, personas que han organizado proyectos
comunitarios e
23
integrantes de las diversas
misiones educativas: Robinson, Ribas, Sucre, Cultura; así como fortalecer los
grupos estables en las bases de misiones, consejos comunales y comunas. • Los
grupos estables permiten contextualizar el currículo desde prácticas educativas
sencillas y cotidianas. Son establecidos por el colectivo escolar y surgen de
la indagación de los saberes que tienen los distintos participantes en el hecho
educativo escolar y comunitario, por lo tanto esos saberes y conocimientos se
organizan en actividades precisas para ser legadas a los y las estudiantes y
comunidades. Es importante que se designen coordinadores y coordinadoras de la
organización y seguimiento de los grupos estables en cada institución y en los
circuitos educativos (dentro de su jornada laboral, no es un cargo, es una responsabilidad),
siempre favoreciendo la incorporación de todos y todas. Por ejemplo, un
profesor de Lengua puede coordinar un grupo estable de teatro (no es exclusivo
de un especialista de Teatro), un maestro de aula pudiese organizar un equipo
de futbolito (no es exclusivo del docente de educación física), cada uno y cada
una con sus inclinaciones, conocimientos y prácticas.
• Toda persona que desee
coordinar un grupo estable debe tener experiencia y conocimiento para ello. Es
decir, si va a enseñar cuatro debe saber tocar cuatro, si abrió un equipo de
futbolito, debe saber enseñarlo y jugarlo. Pueden coordinar grupos estables,
docentes, obreros, obreras, administrativos, administartivas, cocineros,
cocineras, estudiantes personas de la comunidad, cultores y cultoras, siempre bajo la coordinación de un o una
docente. • El centro educativo se configura de otra forma, dando paso a otra
visión de escuela, donde los intercambios de saberes se hacen de manera
práctica. Mayor flexibilidad en la manera como se conciben cuadraturas,
horarios, “clases”. Una nueva manera de concebir y hacer escuela. Los grupos
estables deben ser espacios donde todos y todas los actores del hecho educativo
y comunitario se sientan bien trabajándolos. • Los GRUPOS ESTABLES no son clubes,
no son charlas, no son extracátedra, no son actividades complementarias o
extracurriculares. No son notas ni puntajes para salir mejor en una asignatura.
Todos los estudiantes y todas las estudiantes deben participar en algún grupo
estable. En los grupos estables se deben garantizar todos los referentes éticos
y procesos indispensables. Los grupos estables no son para excluir ni para
generar desigualdades, injusticias ni discriminaciones. Metiendo a un
estudiante en un grupo estable en el que no desea participar es tan excluyente,
desigual, injusto y discriminatorio como dejarlo por fuera en un grupo estable
en el que desea participar. • En el abordaje de los VALORES, sobre todo hacer
énfasis en la IDENTIDAD Y LA CONVIVENCIA. La identidad como ser humano, reconocerse
como una persona única y como parte de una familia y de una comunidad.
Reconocerse con sus inclinaciones y potencialidades, complementándose y
conviviendo con las potencialidades e inclinaciones de los y las demás. • Los
grupos estables permiten también una cultura escolar más organizada. Alrededor
de la planificación, por ejemplo, de grillas culturales y deportivas, eventos
especiales en el marco de efemérides importantes, aniversario de la escuela,
resaltar el epónimo, entre
24
otras. Una cultura escolar que
VALORE LO PEDAGÓGICO, CULTURAL Y FORMATIVO DE MANERA PERMANENTE. Todo lo que se
hace en la escuela debe ser formativo, los actos, eventos, actividades son
oportunidades de identidad, amor por la patria, valores de convivencia y
metodologías para el trabajo en colectivo, la organización y la comunicación.
Para la formación del ser humano integral y para producir la transformación
social, ética y moral que la patria y Latinoamérica necesita, ya que se
fundamenta y persigue, retomar y perpetuar los valores de la identidad de los
pueblos. • Los horarios para implementar los grupos estables pueden ser
flexibles y deben ser consensuados, ya que para poder inscribir a los y las
estudiantes por grupos de interés, deben poderse desarrollar de manera simultánea. Asimismo, si un o una estudiante participa en
actividades fuera de la escuela, como por ejemplo, que forme parte de un equipo
de beisbol o un grupo de teatro o en el sistema nacional de orquestas, se considera
como formando parte de un grupo estable. La maestra, el maestro, el profesor
guía o la profesora guía debe hacer seguimiento de la participación de los y
las estudiantes en estas actividades. • El número de grupos estables dependerá
de las necesidades, intereses y potencialidades de la institución y del
circuito educativo. Cada organizador u organizadora de un grupo estable debe
indicar cuántos o cuántas estudiantes puede atender según la naturaleza del
grupo estable que brinda (puede inclusive organizar varios grupos) y debemos
hacer el mayor esfuerzo porque no queden en la institución estudiantes sin un
grupo estable donde pueda participar, es decir, que cada estudiante debe poder
participar en por lo menos un grupo estable, siempre respetando que no se le
obligue a pertenecer a un grupo estable que no sea de su interés.
• LOS GRUPOS ESTABLES DEBEN SER
UNA OPORTUNIDAD PARA EL DISFRUTE, LA BUENA VOLUNTAD, ACTITUD PARTICIPATIVA Y
CON BUENA DISPOSICIÓN. Evitar choques, conflictos, enfrentamientos. Los grupos
estables son una tremenda oportunidad de trabajo colectivo, compartido y de
apoyo mutuo en la organización escolar. • Es necesario realizar diagnóstico
en la comunidad a los fines de conocer y
detectar fortalezas y debilidades para que la conformación de los grupos estables se relacione con las
oportunidades comunitarias que tiene el ámbito circuital, aprovechamiento de
espacios comunitarios y generar recursos para la autosustentación, así como
mejorar las experiencias e intercambio de saberes y haceres de otros grupos
estables, con el acompañamiento y seguimiento por parte del Consejo Educativo.
Por último, queremos compartir la reflexión de que los adultos y las adultas de
nuestras escuelas no pueden permitir que éstas se conviertan en espacios de
egoísmo, indiferencia, intolerancia, individualismo, de pugnas personales, de
desidia y estropicio, del “sálvese quien pueda”, de violencia verbal y física,
de indolencia y discriminación, sino que, al contrario, la escuela emane hacia
la sociedad, alternativas societarias de convivencia en familia y en comunidad.
Los grupos estables permiten desde la práctica, desde las experiencias
compartidas, crear las condiciones de aprendizaje para aprender a aprender,
aprender haciendo, aprender en colectivo y aprender conviviendo. Que la escuela
sea un lugar agradable y tranquilo, donde los y las estudiantes se sientan
cómodos, cuidados, y queridos,
formándose y aprendiendo.
25
El Programa Todas las Manos a la
Siembra A través del Programa Todas las Manos a la Siembra (PTMS), se está
creando en el país una cultura de sembrar en nuestras instituciones educativas.
Es un programa formativo bajo el enfoque agroecológico, no es sembrar por
sembrar. Implica crear las condiciones para aprender a sembrar, a convivir, a
respetar el ambiente, a transformar los patrones alimenticios y a contribuir
todos y todas a preservar el planeta Tierra. El programa “ Todas las Manos a la
Siembra”,con sus estrategias y actividades, propicia la formación en, por y
para la soberanía. No es sólo los alimentos que sembramos sino la siembra del
espíritu del trabajo para la emancipación y el inicio de un proceso
irreversible de identidad y arraigo, tanto en lo individual como en lo
colectivo. Desde el PTMS se ha logrado vincular la formación con la producción.
En él se vinculan temas como la alimentación, la salud, la higiene, con la
botánica, la química, la física, la geografía y la historia, es decir, que el
PTMS es en sí mismo integral. La meta para este año escolar es que las
instituciones de todos los niveles y modalidades siembren. Tanto urbanas como
rurales, en pueblos indígenas y afrodescendientes. Según las características de
las escuelas, buscar y crear espacios susceptibles para la siembra, formarse en
formas de riego para el uso eficiente y racional del agua y métodos de riego especiales
donde no exista abundante cantidad de agua. Formación en el control biológico
de plagas, en el ensemillamiento y en el conocimiento de los rubros de ciclo
corto y mediano para poder obtener cosecha en el menor tiempo posible, aprender
a producir composteros y a trabajar la lombricultura. Énfasis en: • Según el
espacio, se pueden hacer huertos, parcelas, patios productivos, barbacoas,
siembras verticales, entre otros. LO MÁS IMPORTANTE ES QUE LA FORMACIÓN REDUNDE
EN QUE TAMBIEN LOS Y LAS ESTUDIANTES SIEMBREN EN SUS HOGARES Y MOTIVEN A SUS
FAMILIAS A SEMBRAR, COMPARTIENDO EL CONOCIMIENTO QUE APRENDEN EN LA ESCUELA. •
Formar en los valores del trabajo, de la convivencia, del encuentro y del
aprendizaje cooperativo. Abrir espacios de reflexión acerca de la importancia
de la producción, de cómo superar el rentismo petrolero y el consumismo
desmedido. • Apoyarse con las escuelas punto y círculo y con las fortalezas del
circuito educativo para el intercambio de los recursos entre las distintas
escuelas. • Continuar con la recolección de las semillas por parte de las
madres cocineras y los padres cocineros. Aprender a comer con lo que disponemos
en el contexto, con conocimiento de lo que disponemos en el contexto, con
conocimiento de su valor en proteínas, vitaminas, azúcares, carbohidratos.
Intercambiar semillas entre las escuelas y crear brigadas agroecológicas (puede
ser un grupo estable) de cuidado y resguardo de la siembra. Elaboración e
intercambios de recetarios, realización de ferias gastronómicas. • Apoyarse con
las instituciones y organismos tales como el Ministerio del Poder Popular para
la Agricultura Urbana, el CIARA, el INCES, entre otros, para el apoyo técnico y
logístico.
26
• Es muy importante que para este
año escolar logremos incorporar con entusiasmo y buena disposición a todo el
personal docente en el PTMS. En el marco de la pedagogía del amor, el ejemplo y
la curiosidad, es necesario que los niños, las niñas, adolescentes y jóvenes
vean en sus adultos y adultas una referencia como ciudadano y ciudadana
dispuesto para la producción. VAMOS JUNTOS Y JUNTAS A INTENTARLO. BASTA UNA
SOLA VEZ QUE UNA PERSONA RECOJA SU PRIMERA COSECHA, POR EJEMPLO, DE MELÓN,
PIMENTÓN, AJÍ, CEBOLLÍN, PARA QUE QUEDE PRENDADO DE SEMBRAR. Es un verdadero
encuentro con nosotros mismos y nosotras mismas como seres humanos fértiles y
útiles a la comunidad. Aspectos propios de la Modalidad de Educación
Intercultural Bilingüe Las orientaciones que hemos dado con respecto a la línea
estratégica del proceso de transformación curricular han sido de manera general
a todos los niveles y modalidades, sin embargo, queremos resaltar los avances y
retos que tiene el MPPE en el proceso de garantizar el cumplimiento del
Capítulo IX de la CRBV, en cuanto a los pueblos indígenas y su derecho a una
educación propia (artículo 21 de la CRBV). La Educación Intercultural Bilingüe
para los pueblos indígenas es una modalidad del Sistema Educativo Nacional
Bolivariano basada en los principios y
fundamentos de la educación propia de cada pueblo indígena, en su idioma,
cosmovisión, valores, mitología, espiritualidad y organización social como
mecanismo de preservación, fortalecimiento y transmisión de la identidad
originaria que constituye el acervo cultural de la nación y es complementada
sistemáticamente con la enseñanza del castellano fortaleciendo y ampliando su
cultura propia y al mismo tiempo apropiando en forma crítica y selectiva, a
través de la interculturalidad, conocimientos, saberes y haceres pertenecientes
a otras culturas. Para ello se planifican estrategias metodológicas, pedagógicas y didácticas
originarias propias que respondan a las características especificas de cada
pueblo y comunidad indígena y, en este sentido, se inician los Proyectos
Educativos por Pueblos Indígenas, los cuales se adecuan a la realidad
sociocultural y geográfica de cada pueblo y comunidad, estableciendo que cada
pueblo tenga el derecho a un aprendizaje propio que responda a sus necesidades particulares
aunque compartan las mismas tierras con otros pueblos o comunidades indígenas.
En este momento, se está en proceso de consolidación los Proyectos Educativos
Piaroa (Huotja), Ye´wkuana (Amazonas), Warao (Delta Amacuro), Pemón (Bolívar) y
se está en proceso de inicio el acompañamiento y sistematización de los
proyectos educativos Jiwi, Yanomami y Kurripako (Amazonas), Ka´riña
(Anzoátegui), Yukpa y Bari (Zulia), Pumé (Apure). En cuanto a los nichos
lingüísticos, el colectivo zonal e institucional debe promover la creación de
los Nichos Etnolingüísticos en aquellos Estados, pueblos y Comunidades
Indígenas donde se han identificado la pérdida de sus valores socioculturales y
lingüísticos, manteniendo el acompañamiento a los siete Nichos Etnolingüísticos
ya formalmente constituidos en los Estados Bolívar, Zulia y Amazonas, así mismo
llevar a cabo las orientaciones de constitución a los nuevos nichos que se
crearán paulatinamente, según la resolución ministerial correspondiente. Es
necesario impulsar el uso de la Vestimenta Escolar Indígena (Ver Resolución
Ministerial), para todos los centros educativos e Instituciones interculturales
bilingües en los estados con mayor presencia de pueblos indígenas, así como la
práctica de los los Calendarios productivos socioculturales indígenas (Ver
orientación Viceministerial 001).
27
Cada colectivo zonal debe
realizar un diagnóstico de la población indígena escolarizada en cada estado,
identificando instituciones y centros educativos y número de estudiantes por
pueblo indígena. Todas las instituciones y centros educativos, ubicadas en
Territorios y Habitats de los Pueblos y Comunidades indígenas y áreas rurales y
urbanas con presencia indígena conformarán “Grupos Culturales indígenas”
internos con nombres en idiomas propios que fomenten, practiquen y difundan la
diversidad de danzas, cantos, cuentos, toques instrumentales, teatro indígena,
maquillaje, vestimenta, juegos tradicionales, cuentos e historias y realizar
encuentros interescolares, intermunicipales e interregionales entre las
escuelas indígenas a fin de socializar la Educación Intercultural Bilingüe. La
educación propia de los pueblos y comunidades indígenas debe ser el punto de
partida de la educación intercultural bilingüe en todos los niveles y
modalidades del Sistema Educativo Nacional, a través de la articulación con el
Instituto Nacional de Idiomas Indígenas y las Direcciones Territoriales del
Ministerio del Poder Popular para los Pueblos Indígenas. Los idiomas son la
expresión lingüística de las relaciones y comunicación humanas, por lo que la
relación de convivencia de un pueblo está expresada en su idioma y viceversa,
el idioma enseña a los niños y las niñas a relacionarse en su comunidad. En
este sentido, es importante que en cada región SE RESPETE Y SE RECONOZCA LA
EDUCACIÓN INTERCULTURAL BILINGÜE (CON SU PEDAGOGÍA PROPIA Y SU METODOLOGÍA),
AUNQUE EL PUEBLO INDÍGENA HAYA PERDIDO SU IDIOMA ORIGINARIO. Es intercultural y
es bilingüe en tanto se refleja en las relaciones humanas, en sus expresiones y
creencias, la manera como su idioma se construyó (sigue siendo bilingüe). De
esta manera la comunidad se preserva y sigue siendo un legado para las
relaciones societarias de convivencia de la humanidad, haciéndose la comunidad
protagonista de su propia cultura, conociéndola con dignidad y empoderándose de
ella. Sistema Nacional de Investigación y Formación del Magisterio JORNADAS DE
REFLEXIÓN, AUTOEVALUACIÓN DE LA VIDA INTERNA DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS Y
DE COMPROMISOS El sistema nacional de investigación y formación se está
consolidando y podemos decir que se ha fortalecido en las dimensiones
conceptuales, metodológicas, organizativas y comunicacionales. Se cuenta hoy
con centros de investigación y formación en todos los municipios del país y se
están conformando y consolidando progresivamente los colectivos de
investigación y formación tanto institucionales como circuitales. Lo más
importante es que LA FORMACIÓN PERMANENTE ES DESDE LA PRÁCTICA EDUCATIVA. Es un
proceso de investigación, auto y coformación centrado en la práctica pedagógica
(es una reflexión que se hace desde la práctica) y busca mejorarla para el
logro de los fines de la educación en todas las instituciones educativas. En
este marco de formación permanente, se plantea para el inicio del año escolar,
realizar jornadas de reflexión, autoevaluación (la escuela se evalúa a sí
misma) y de compromisos en el marco del proceso de transformación curricular.
Implica reflexionar sobre las prácticas pedagógicas en cada institución
educativa, caracterizándola en su contexto específico, determinar las
principales problemáticas de
28
aprendizaje y formación, los
procesos en desarrollo y las potencialidades internas. Esta caracterización
debe realizarse teniendo como referentes los diez retos de la consulta por la
calidad educativa, las orientaciones pedagógicas del año en curso, los
documentos del proceso de transformación curricular, la ley orgánica de
educación, el Plan de la Patria y la CRBV. De esta manera la caracterización
permite hacer una fotografía real de nuestra escuela y nuestra práctica
cotidiana y cuáles serían los desafíos y compromisos a la luz de los referentes
éticos y procesos indispensables planteados. Para la realización de estas
jornadas se recomienda la lectura de estas orientaciones y utilizar la
investigación acción participante y transformadora como metodología. En otras
palabras, la reflexión y autoevaluación debe llevar a una interpretación de la
práctica y ésta a su verdadera transformación.
En el transcurso del año escolar
se realizarán los Congresos Pedagógicos (circuitales, municipales, estadales y
nacional), donde maestros y maestras junto a sus estudiantes y comunidad
educativa en general, socializan, intercambian, teorizan, construyen
colectivamente y se comprometen con las transformaciones educativas. En función
de la dinámica escolar, se espera que se desarrollen:
Diciembre: Congresos Pedagógicos
Circuitales. Marzo: Congresos Pedagógicos Municipales. Junio: Congresos
Pedagógicos Estadales. Julio: Congreso Pedagógico Nacional
Asimismo, en el marco de la
Micromisión Simón Rodríguez, continuará desarrollándose, desde sus diversas
áreas, el Programa Nacional de Formación Avanzada para Docentes, como mecanismo
de articulación para la formación docente permanente. Se trata de POSTGRADOS
GRATUITOS que se fundamentan en la reflexión y transformación de la práctica
pedagógica, desde la propia práctica del docente y desde la escuela. Los ejes
de formación para las distintas áreas
son la investigación acción participativa y transformadora, la reflexión
pedagógica y el desarrollo del área de especialización.
Repensar la jornada laboral Parte
del proceso de transformación curricular es la manera como concebimos la
jornada laboral. Heredamos de la vieja cultura escolar una concepción de que el
y la docentes trabajan por horas y dando clases (si un docente o una docente no
está dando clases, “no está trabajando”). En todos los niveles y modalidades se
ha creado una organización escolar bastante inhumana, por lo que para este año
escolar se está trabajando para poder progresivamente humanizar la jornada
laboral. Un maestro o una maestra cuida, protege, atiende y forma a sus
estudiantes. Debe poder también tener espacios, dentro de la misma jornada
laboral, para poder planificar, formarse, organizar grupos estables, para el
trabajo comunitario, entre otras actividades.
El trabajo colectivo y
cooperativo, el apoyo mutuo, la complementariedad son importantes para otra
forma de hacer escuela y de participar en las labores de la escuela. ES UN
TRABAJO COLECTIVO, NO UN ESFUERZO INDIVIDUAL. Como decía el maestro Simón
Rodríguez “si todos pensamos en todos, no faltará quien piense en mí”. Así debe
ser el espíritu escolar: todos y todas velando por todos y todas. Todos y todas
garantizando todos los procesos y los fines educativos.
29
En educación media, debemos
construir una organización escolar donde los educadores y las educadoras puedan
distribuirse de manera equitativa el número de secciones y el número de
estudiantes. Por ejemplo, si dos docentes tienen 36 horas, no tiene sentido que
uno tenga seis secciones y el otro tenga dos secciones y el resto en “horas
variables” u “horas por programar”. Los liceos y escuelas técnicas deben
eliminar estas horas por programar y horas variables. La distribución de las
horas de las y los docentes por áreas de formación, debe procurar que cada uno
y cada una cuenten con horas de acompañamiento para el estudio, la
planificación, la atención a los y las estudiantes y familias, guardias u otras
actividades propias del hacer escolar. Estas horas deben reflejarse en el
horario laboral de cada docente, incluyendo las actividades como el acto
cívico, acompañar a sus estudiantes en la hora de la comida y la orientación y
convivencia cuando se trata de un o una docente guía. TODAS LAS ACTIVIDADES
QUEDAN REFLEJADAS EN SU HORARIO LABORAL.
PROCESO DE TRANSFORMACIÓN
INSTITUCIONAL El proceso de transformación institucional no está separado del
proceso de transformación curricular. Tanto en su concepción, en sus métodos,
su manera de organización y comunicación, forma parte de la cultura escolar.
Transformar los enfoques, lógicas y métodos en el currículo incluye la
transformación de cómo se concibe, funciona y se organiza la institución. Sin
embargo, en términos de orientar la consolidación de la plataforma organizativa
en el territorio, se presenta como una línea estratégica que le dé
direccionalidad y permita un seguimiento más riguroso a este proceso de
transformación curricular..
Los circuitos educativos Hoy, en
el proceso de municipalización y territorialización del sistema educativo, con
la construcción de instituciones educativas donde existe la necesidad y la
creación de los CIRCUITOS EDUCATIVOS como UNIDADES TERRITORIALES en las cuales
todo niño y toda niña se incorpore al sistema educativo, se crean las
condiciones reales de inclusión escolar. La cultura escolar que heredamos y que
progresivamente hemos estado superando, responde a una cultura parcelada,
individualista, de competencia e intolerancia
de la sociedad sin planificación ni organización en el territorio según
cada contexto. Cada plantel andaba por su lado e inclusive, instituciones que
comparten la misma planta física se estorban mutuamente, se culpan entre sí de
las fallas y se desconocen como parte de una misma comunidad. Si un niño, por
ejemplo, egresó de la escuela del turno de la mañana y pasa al liceo del turno
de la tarde, la maestra dice “el ya no es mío”, los y las docentes del liceo
desconocen a las maestras y los maestros de la escuela como ajenos y ajenas a
su organización escolar y la comunidad del turno de la mañana se enfrenta a la
comunidad del turno de la tarde (siendo inclusive vecinos y vecinas). Así
ocurre con muchas instituciones educativas que la vieja cultura escolar separó
y dividió. Es por esto, que los circuitos educativos permiten otra manera de
planificación y organización escolar en el territorio favoreciendo que los
seres humanos de nuestras instituciones educativas puedan encontrarse, verse
como iguales, pertenecientes a las mismas comunidades y asumir el cuidado, la
protección y formación de todos los niños, las niñas, adolescentes, jóvenes,
adultos y adultas, como iguales, garantizando su inclusión y prosecución, a
través del trabajo compartido, del apoyo mutuo y de la convivencia.
30
Un circuito educativo está
formado por un conjunto de instituciones educativas, incluyendo los servicios
educativos, a los fines de garantizar el derecho humano de todas las personas a
una educación integral, de calidad, permanente y en igualdad de condiciones y
oportunidades. En el circuito educativo se deben garantizar los procesos del
hecho educativo, una gestión escolar participativa y protagónica, con el
trabajo integrado de todas las instituciones en coordinación con las familias y
las comunidades. Su propósito es desarrollar acciones articuladas, cooperativas
y solidarias entre todos los centros educativos de un territorio local definido
por su cercanía geográfica, conformado por sus criterios poblacionales,
culturales, étnicos, lingüísticos, ambientales, comunales, conjuntamente con
las actividades económicas, sociales y educativas. La conformación del circuito
educativo incorpora nuevas formas de comunicación, conocimiento,
reconocimiento, organización y encuentro entre los centros educativos, sus
comunidades, las familias y otras instancias del poder popular en el contexto
geohistórico, político, social, económico, cultural y ambiental de cada lugar,
bajo los principios de convivencia, solidaridad, apoyo mutuo, concurrencia,
corresponsabilidad, complementariedad, vecindad, contigüidad. El circuito solo
será educativo si logra potenciar ese conjunto de capacidades humanas, en la
medida que comience a reunir a los ancianos y las ancianas, cultores y
cultoras, conuqueros, conuqueras, pescadores, pescadoras, albañiles,
carpinteros, mecánicos, médicos, bodegueros, ingenieros, ingenieras, otros técnicos y profesionales y
a los maestros y las maestras, donde vayan aprendiendo unos y unas, de otros y
de otras, y donde vayan organizándose para contribuir todos y todas en la
formación integral de las niñas, los niños, adolescentes, jóvenes, adultos y
adultas, enmarcándose en temáticas curriculares que toquen situaciones de la
vida diaria y se puedan resolver los problemas de las comunidades a partir del
trabajo colectivo: equipos de dirección, las maestras y los maestros, los
dirigentes sociales, voceras y voceros de consejos comunales y otras
organizaciones comunitarias, servidores y servidoras públicos que viven o
trabajan en la comunidad, sumando a madres, padres, obreros, personal
administrativo, cocineras y cocineros de la patria, Consejos Educativos de
todas las instituciones educativas del circuito, incorporación de voceros y
voceras de la Federación Venezolana de Estudiantes de Educación Media (FVEEM), voceros
y voceras de las familias, el Movimiento Bolivariano de Familias (MBF), en un
proceso de convivencia, intercambio y apoyo mutuo, activando el uso de recursos
como la Canaima educativa, la Colección Bicentenario, los laboratorios,
compartir canchas en el circuito, entre otros, dinamizando los aprendizajes, a
partir de la atención a problemas comunitarios y el abordaje a situaciones en el contexto. Los circuitos educativos
constituyen en el proceso de transformación institucional, su concreción en el
lugar, por lo que debe convertirse en una instancia de planificación,
organización, comunicación y conocimiento territorial. El circuito educativo
tiene su base en las instituciones educativas oficiales nacionales,
articulándose con los planteles estadales y municipales. El circuito educativo
activa y refuerza el cumplimiento y desarrollo de las políticas educativas. Es
un reto para los directores y las directoras de todas las instituciones
educativas del circuito educativo, formarse, juntarse, planificar y organizar
las actividades poniéndose de acuerdo, formando colectivos de directores y
directoras de todos los niveles y modalidades (sin fraccionamiento ni
parcelas). Planificar juntos y juntas, por ejemplo, el mantenimiento y la
seguridad escolar (solo será posible en la medida en que la comunidad asuma que
la escuela es suya y debe mantenerla y cuidarla), la siembra, las grillas
culturales y deportivas, grupos estables
31
entre todos los planteles,
compartir canchas, apoyarse con las casas de la cultura, museos, INCES, entre
otras. Por eso es importante su denominación como circuitos educativos y no
como circuitos escolares, ya que no se limita a las escuelas sino a todas las
personas, organismos e instituciones que impactan en la formación y pueda redundar
en la formación en las familias y la comunidad.
Cada circuito educativo debe contar con un CONSEJO DE DIRECTORAS Y
DIRECTORES que pueda reunirse periódicamente a deliberar, planificar y evaluar
los avances, potencialidades y desafíos en el circuito educativo. Debe
establecerse un sistema de trabajo que le permita desde una visión colectiva y
territorial, generar planes de trabajo en el que se aborden las problemáticas
de las escuelas, las necesidades de docentes, que se garanticen los procesos
educativos, se constituya en espacio de investigación y formación permanente,
por ejemplo, con respecto a las memorias históricas, características
socioculturales, actividades productivas, sustento económico de las familias y
la comunidad, costumbres, valores, concepciones pedagógicas, entre otras. Se
requiere asumir por circuitos educativos la direccionalidad de los recursos
para el aprendizaje, intercambiar experiencias desde las distintas regiones
para superar debilidades y fortalecer la política educativa en el contexto de
los circuitos educativos. El circuito educativo debe reunir de manera periódica
a voceros y voceras de LOS DISTINTOS CONSEJOS EDUCATIVOS, creando condiciones
para la corresponsabilidad, el apoyo mutuo, la complementariedad, la
convivencia y la concurrencia para la atención de las necesidades de todas las
instituciones educativas del circuito. A veces, cuando la institución educativa
se encuentra en el centro de una ciudad (casco central, zona urbana), los y las
estudiantes pertenecen a distintas comunidades. ¿Cuál es la comunidad de la
escuela?. Los y las docentes expresan “esta escuela no tiene comunidad”. La
orientación es que cada institución debe crear condiciones para trabajar con
las comunidades aledañas y las comunidades de sus estudiantes. Los y las
estudiantes deben poder transferir sus aprendizajes a la vida de su comunidad
y, a la vez, poder participar en las comunidades del entorno de su institución.
Entonces, ¿Cuál es la comunidad de la escuela?: La de su entorno y las
comunidades de sus estudiantes.
Supervisión educativa territorial
Los circuitos educativos deben tener aproximadamente entre seis a doce
instituciones educativas cada uno, esto va a depender de las características de
la localidad. Cada circuito educativo tendrá un supervisor o una supervisora
QUE DEBE GARANTIZAR EL SEGUIMIENTO DEL FUNCIONAMIENTO ADECUADO DEL CIRCUITO
EDUCATIVO Y DEL SISTEMA DE GESTIÓN ESCOLAR. Tal como lo establece la Ley
Orgánica de Educación (LOE) en su artículo 19: el estado docente “ESTIMULA LA
PARTICIPACIÓN COMUNITARIA, INCORPORANDO TANTO
LOS COLECTIVOS INTERNOS DE LA ESCUELA, COMO A DIVERSOS ACTORES COMUNITARIOS PARTICIPANTES ACTIVOS DE
LA GESTIÓN ESCOLAR EN LAS INSTITUCIONES,
CENTROS Y PLANTELES EDUCATIVOS EN LO
ATINENTE A LA FORMACIÓN, EJECUCIÓN Y CONTROL DE LA GESTIÓN EDUCATIVA, bajo el principio de
corresponsabilidad”. Es así como, cada supervisor o supervisora debe propiciar
la conformación de colectivos de directores y directoras circuitales, colectivos
de consejos educativos que estudian, planifican y resuelven juntos y juntas las
distintas problemáticas del circuito, apoyándose siempre con las
potencialidades de las comunidades.
32
El supervisor o supervisora de
cada circuito debe evaluar y hacer seguimiento permanente de los logros, avances,
dificultades, distorsiones e innovaciones en la vida circuital, y propiciar los
procesos de autoevaluación, coevaluación y heteroevaluación intra e inter
institucional, unificando criterios para esta evaluación en función del logro
de las finalidades educativas. En la práctica supervisora es necesario un
enfoque que supere la lógica técnico punitiva heredada. El artículo 43 de la
Ley Orgánica de Educación (LOE) establece que “El Estado formula y administra
la política de supervisión educativa como un proceso único, integral,
holístico, social, humanista, sistemático y metodológico, con la finalidad de
orientar y acompañar el proceso educativo, en el marco de la integración
escuela-familia-comunidad, acorde con los diferentes niveles y modalidades del Sistema
Educativo. Se realizará en las instituciones, centros, planteles y servicios
educativos dependientes del Ejecutivo Nacional, Estadal y Municipal, de los
entes descentralizados y las instituciones educativas privadas, en los
distintos niveles y modalidades para garantizar los fines de la educación
consagrados en esta Ley. La supervisión y dirección de las instituciones
educativas serán parte integral de una gestión democrática y participativa,
signada por el acompañamiento pedagógico”. Asumir una supervisión signada por
el acompañamiento pedagógico implica asumir una supervisión que sea útil para
la transformación de la práctica educativa. Un abordaje diferenciado que
reconozca distintos ritmos, realidades y contextos. Un abordaje diferenciado
que implica estar atento y atenta a propiciar y crear condiciones para la
formación permanente, convertir toda necesidad y situación en oportunidad de
aprendizaje, reflexiones, formación y transformaciones en la práctica
pedagógica, utilizando las metodologías propias de la participación
protagónica. Desde este enfoque, el supervisor y la supervisora caracterizan el
contexto para un abordaje pertinente y
con respeto a la dignidad humana, contextualizando según la realidad. En
situaciones de conflicto, es importante escuchar, registrar y sistematizar las
distintas versiones para así favorecer la solución más conciliatoria, siempre
teniendo en cuenta que prevalecen los intereses y necesidades de niños, niñas y
adolescentes y luego los de adultos y adultas, anteponiendo los intereses de la
escuela, sobre los intereses particulares. En la toma de decisiones actuar con
transparencia, honestidad y justicia social. Propiciar que el mismo colectivo
proponga las decisiones y acciones a tomar. En lo posible generar que las alternativas
de solución salgan del colectivo. Elaborar el registro correspondiente de
conclusiones, acuerdos y compromisos respectivos, dejando las orientaciones
pertinentes y puntualizando las acciones para el seguimiento. Es muy importante
en este proceso de transformación institucional, que cada supervisor o
supervisora del circuito educativo propicie y cree condiciones para que los
directores y las directoras de las instituciones educativas se conciban como
circuito en la toma de decisiones y en el trabajo pedagógico colaborativo. Cada
supervisor y cada supervisora tienen el reto histórico de superar las viejas
prácticas supervisoras y deberán ORIENTAR EL PROCESO DE AUTOEVALUACIÓN (la
escuela mirándose a sí misma), DE COEVALUACIÓN (las escuelas del circuito
educativo se coevalúan) y realizan LA HETEROEVALUACIÓN (evaluación externa).
Los supervisores y las supervisoras territoriales son garantes de la
utilización del Sistema de Gestión Escolar (SIGE) por parte de todas las
instituciones educativas del circuito. El SIGE cada
33
día se va fortaleciendo y se va
potenciando como el mecanismo de automatización QUE PERMITE PROGRESIVAMENTE
SUPERAR LA BUROCRATIZACIÓN Y LOS TRÁMITES ADMINISTRATIVOS ENGORROSOS Y
OBSTACULIZADORES DE PROCESOS. A través del Sistema de Gestión Escolar se
favorecen las informaciones fidedignas y reales que permitan la toma de
decisiones oportunas y pertinentes, un mayor y real conocimiento de las
instituciones educativas, sinceración y viabilización de procesos y que los
usuarios y las usuarias puedan acceder a la información de manera más eficaz y
eficiente. Queremos orientar a los directivos de todas las instituciones
educativas a valorar este sistema, darle
el uso de manera responsable, tener conciencia de que el retardo, por ejemplo,
en la carga de la información de su institución implicará en el desconocimiento
de la misma y por lo tanto, en la imposibilidad del MPPE en la satisfacción
oportuna de sus necesidades educativas. Más allá de generar procesos punitivos
hacia directivos que no cargan la información en el SIGE, queremos insistir en
la importancia de que SE COMPRENDA, SE VALORE
Y SE POTENCIE la utilización del SIGE.
La práctica directiva en el
circuito educativo El Gobierno debe proceder como hasta aquí: elegir entre la
multitud, no un sabio, pero sí un hombre distinguido por su educación, por la
pureza de sus costumbres, por la naturalidad de sus modales, jovial, accesible,
dócil, franco, en fin en quien se encuentre mucho que imitar y poco que
corregir.
LA
INSTRUCCIÓN PÚBLICA. SIMÓN BOLÍVAR 1825
Primero, queremos hacer un
sincero reconocimiento al personal directivo y de coordinación que día a día
hacen grandes esfuerzos por garantizar los procesos educativos en sus
instituciones, a veces contracorriente
de las viejas lógicas y de las resistencias propias de procesos de
transformación. Ser director o directora de una institución educativa, requiere
dar un vuelco a las viejas lógicas y métodos de la autocracia para abrir brecha
a la dirección democrática participativa y protagónica. Tarea nada fácil cuando
heredamos de la cultura escolar, una visión del director “el que carga sobre
sus hombros todas las responsabilidades”, la discrecionalidad como práctica
permanente en la toma de decisiones y un divorcio entre el personal directivo y
el personal docente y comunidad educativa en general. A veces, los directores y
las directoras proceden de manera inadecuada ya sea por desconocimiento o por
que privan esas lógicas a las que nos estamos refiriendo, lo cual impide el
seguimiento y solución pertinentes. Por ello, es importante señalar la
necesidad de que en los colectivos de investigación y formación permanente de
cada institución y del circuito educativo, se
incorpore la práctica directiva como parte de esa formación, para así
poder sistematizar nuevas lógicas y nuevos métodos que permitan una gestión
escolar humanista, contextualizada y pertinente con las dinámicas propias de
cada escuela y del circuito educativo a la cual pertenece. En este proceso de
transformación institucional, es un reto para directores y directoras de los
centros educativos, no verse aislados o aisladas, encontrarse con cada director
y cada directora del circuito educativo, conviviendo, complementándose y en un
permanente trabajo cooperativo.
34
El director o directora cumple un
importante papel como supervisor o supervisora de la institución educativa, con
la responsabilidad de orientar y acompañar los procesos que garanticen los
fines de la educación. El director o directora es el o la CUENTADANTE de la institución
(que da cuenta de ella). Sin embargo, DAR CUENTA DE LOS PROCESOS no significa
que es el único o la única responsable de la misma. TODA LA COMUNIDAD
EDUCATIVA, es decir, docentes, personal obrero y administrativo, estudiantes,
madres, padres y representantes, madres cocineras, padres cocineros, el consejo
educativo, consejos comunales y comunidad en general, son corresponsables de
garantizar el goce y ejercicio del derecho humano a la Educación y del logro de
los fines de la educación.
Cada director y cada directora de
las instituciones educativas del circuito educativo, deben favorecer y
garantizar la participación de todos y de todas en los procesos educativos. El
artículo 6, numeral 3 literal j de la LOE, establece que el Estado Docente
planifica, ejecuta, coordina políticas y programas para la “La creación de una
administración educativa eficiente, efectiva, eficaz, desburocratizada,
transparente e innovadora, fundamentada en los principios de democracia
participativa, solidaridad, ética, honestidad, legalidad, economía,
participación, corresponsabilidad, celeridad, rendición de cuentas y
responsabilidad social”. La dirección en las instituciones educativas debe
regirse bajo los principios de honestidad, transparencia, sinceridad, respeto,
responsabilidad, ecuanimidad (serenidad en el juicio), reconocimiento y
comprensión de los otros y las otras, cooperación, humanismo y
solidaridad.
Es importante resaltar que la
razón de ser de todas las instituciones
educativas en los distintos niveles y modalidades es la formación integral de
sus estudiantes, niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas. Esta
perspectiva no se puede perder de vista en la toma de decisiones, en la
construcción de estrategias y en el desarrollo de los procesos. Por ello, se
quiere resaltar los principios de prioridad absoluta e interés superior de
niños, niñas y adolescentes, establecidos en la Ley Orgánica para la Protección
de Niños, Niñas y Adolescentes, LOPNNA,
ya que sirven de plataforma fundamental que le da perspectiva a los
adultos y las adultas que hacen vida en la escuela, para garantizar COHESIÓN, COHERENCIA,
COMPLEMENTARIEDAD, CORRESPONSABILIDAD Y CONVIVENCIA que les permita encontrarse
en este fin común (a pesar de sus diferencias y contradicciones). En este sentido, el director o la directora
debe coordinar que esto sea posible y fundamentarse en los principios y
preceptos que les permite ser pertinentes en las decisiones y criterios.
A veces, las diversas tareas
propias de la administración de una escuela, que en sus distintos contextos
pueden ser muy complejas y difíciles de abordar, desgastan al personal
directivo y lo agotan. Toda persona que, de alguna u otra forma, coordina
procesos (el directivo, el y la maestra en el aula, voceros y voceras
estudiantiles, voceros y voceras comunitarios, entre otros), debe propiciar,
promover, favorecer, fortalecer y consolidar formas de coordinación y de
administración participativas, de respeto y reconocimiento de las diferencias,
con comprensión, poniéndose en la perspectiva de los y las demás y favoreciendo
la unidad y la integración. En la construcción de nuevas estructuras más
humanas y sociales de inclusión, igualdad y justicia, es fundamental
desburocratizar y simplificar procesos administrativos, por ello, se creó la
LEY DE SIMPLIFICACIÓN DE TRÁMITES ADMINISTRATIVOS, la cual debe ser del
conocimiento y aplicación de todos y todas para exigir los cambios necesarios e
innovar con nuevas formas de administración.
35
En situaciones de faltas,
conflictos, problemas, se requiere de un
abordaje diferenciado que responda de manera pertinente a la situación,
problemática o necesidad presente. Cada director y directora, deben estar
preparados y preparadas para promover y propiciar la formación permanente de
los distintos colectivos, brindar las orientaciones necesarias y pertinentes a
las situaciones encontradas, favoreciendo y fortaleciendo LO COLECTIVO en los
procesos del hecho educativo. Por otro lado, deben ser respetuosos y
respetuosas de los sujetos y sujetas que forman parte de una dinámica propia
con su ritmo y desarrollo, generando estrategias y acciones que propicien la
auto y coregulación de los procesos desde las propias reflexiones, conclusiones
y decisiones de los colectivos, con miras al logro de los propósitos
educativos. Cada director o directora son referente de cooperación,
comunicación, solidaridad, tolerancia y comprensión, sensibilidad y compromiso
social, disposición a escuchar y a aprender, mediación, conciliación y facilitación, firmeza, creatividad e
innovación, respeto y reconocimiento de las diferencias, responsabilidad,
ecuanimidad, humildad, sinceridad y
honestidad en la intención, vocación de servicio, promoción social, compromiso
con los postulados constitucionales, de enfoque humanista, socialista y
ecológico, de ética, coherencia entre el pensar, decir, sentir y hacer, y, con
actitud investigativa y de acción, reflexión y acción permanentes. Es
fundamental que tenga la firmeza y la convicción de la protección de niños,
niñas y adolescentes como sujetos de derecho, prioridad absoluta e interés
superior.
Los directores y las directoras
deben ser personas con idoneidad y experiencia pedagógica y comunitaria.
Conocedores y conocedoras de los fundamentos filosóficos, políticos y legales
de la Educación Bolivariana, popular y liberadora, comprometidos y
comprometidas con los principios filosóficos, metodológicos y organizativos establecidos
en la CRBV, PNSB, LOE Y LOPNNA. Igualmente, debe tener la capacidad y habilidad
de la mediación en conflictos (no convertirse en un problema más cuando la
situación se escapa de las manos) y, disposición permanente al trabajo en
colectivo.
Sistema de
alimentación escolar
El Programa Alimentario Escolar
(PAE), creado por el Presidente Hugo Chávez en el año 1999, se ha convertido en
ejemplo para América Latina y el mundo, ya que se centra en la satisfacción
directa de la necesidad de alimentación de niños, niñas y adolescentes en la
propia escuela; no son becas, cheques o bonos. Cada estudiante tiene
garantizado su alimento a través del trabajo conjunto del personal de cada
institución (el equipo docente, las madres cocineras y padres cocineros), siendo
este un PROGRAMA PEDAGÓGICO. En la década de los noventa la desnutrición
infantil alcanzaba cifras críticas y hoy podemos decir que la alimentación
escolar es parte fundamental del sistema educativo. En este sentido, en estos
años la revolución bolivariana ha creado el SISTEMA NACIONAL DE ALIMENTACIÓN
ESCOLAR, con la finalidad de garantizar los procesos, recursos y mecanismos
adecuados para QUE NUESTROS Y NUESTRAS ESTUDIANTES COMAN.
El sistema de alimentación
escolar (SAE), como su nombre de sistema lo indica, tiene COMPONENTES,
PRINCIPIOS Y PROCEDIMIENTOS que garantizan sus propósitos. Es así como, no solo
el Ministerio del Poder Popular para la Educación participa, están incorporados
en esta responsabilidad, el Ministerio del Poder Popular para la Alimentación
(provee el alimento),
36
el Instituto Nacional de
Nutrición que certifica la calidad, instituciones que garantizan servicios de
electricidad y agua, las gobernaciones y alcaldías (saneamiento, fumigación),
el Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) (monitorea la salud de los
cocineros y las cocineras y el manejo adecuado de los alimentos), entre otras.
Como parte del sistema, se creó la Corporación Nacional de Alimentación Escolar
(CNAE) que GARANTIZA LA PREPARACIÓN DE LOS ALIMENTOS Y LA ENTREGA DE LA COMIDA
A LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS. El CNAE solicita la comida al MERCAL y le hace
seguimiento para que llegue a cada escuela y provee del personal, es decir, las
cocineras y los cocineros para que EL PROGRAMA DE ALIMENTACIÓN ESCOLAR (PAE)
funcione. Para este año escolar se
quiere hacer énfasis en la importancia de que los niños, las niñas y
adolescentes coman en un ambiente amigable, sano, agradable y pedagógico, en
compañía de sus maestros, maestras, profesores y profesoras. El trabajo cooperativo
y solidario para que todos y todas tengan su alimentación, en la higiene de los
espacios de alimentación y en el conocimiento de la importancia de los
alimentos para la salud. Así mismo, para este año se va a fortalecer el proceso
de REGIONALIZACIÓN DEL PAE, tomando en consideración los rubros de cada región,
las recetas gastronómicas propias del contexto, distribución de alimentos de la
misma zona y la integración de manera permanente al Programa Todas las Manos a
la Siembra (PTMS) para el ensemillamiento, la producción, la alimentación SANA,
SEGURA, SOBERANA Y SABROSA, y la educación desde el trabajo FORMAR PRODUCIENDO,
PRODUCIR FORMANDO. En el proceso de transformación institucional, es necesario
que el SAE cree condiciones para el trabajo integrado en el circuito educativo
para garantizar la alimentación de los niños, las niñas y adolescentes en el
mismo y favorezca en todo momento que el PAE tribute a la formación permanente
de todos y de todas.
Jornadas de
Mantenimiento Escolar
El MPPE y las Zonas Educativas de
todo el país organizarán CONJUNTAMENTE CON LOS CONSEJOS EDUCATIVOS Y LAS
COMUNIDADES, jornadas de mantenimiento escolar en todas las instituciones
educativas del país. La FUNDACIÓN DE EDIFICACIONES Y DOTACIONES EDUCATIVAS
(FEDE) como ente adscrito del MPPE coordinará estas jornadas propiciando la
participación activa de las comunidades en éstas. En la medida en que las
comunidades, las familias, los estudiantes, el personal docente, administrativo
y obrero de las instituciones educativas asuman como suya su escuela, se irá
transformando la cultura escolar desde la desidia, la indiferencia y la
indolencia hacia una cultura de corresponsabilidad, laboriosidad, consciencia,
compromiso y sentido de pertenencia con nuestras instituciones. Las jornadas de
mantenimiento (preventivo y correctivo), se realizará, como una hermosa cayapa
nacional de ejercicio de convivencia, trabajo cooperativo, aprendizaje desde el
hacer y desde el encuentro de la comunidad con su escuela. Se realizarán en las
siguientes fechas (están indicadas en el calendario escolar): Del 03 al 20 de
octubre, primera jornada nacional voluntaria de mantenimiento escolar Del 13 al
31 de marzo, segunda jornada nacional voluntaria de mantenimiento escolares Del
03 al 20 de Julio, tercera jornada nacional voluntaria de mantenimiento
escolares
37
las jornadas voluntarias serán
coordinadas por FEDE, resaltando que es fundamental de los directores y las
directoras de las instituciones educativas de todo los niveles y modalidades
propicien y fortalezcan la participación de los y las estudiantes, sus familias
y comunidades, creando la cultura de amor, resguardo, mantenimiento y cuidado
de sus escuelas.
Proceso Comunitario de Inclusión
Escolar
El proceso comunitario de
inclusión escolar es el proceso mediante el cual se ubican a las niñas, los
niños y adolescentes en instituciones educativas para que inicien o prosigan
sus estudios, garantizándoles la inclusión en espacios educativos lo más cerca
posible a su domicilio, resguardando el derecho al estudio a todos y todas sin
ningún tipo de discriminación (repitientes, población etárea, no convencionales
y aquellos y aquellas que por alguna razón han abandonado su escolaridad
(“vamos por ellos y por ellas”)). Es comunitario porque deben participar los
actores y las actoras del hecho educativo: estudiantes, padres, madres,
representantes, docentes, consejos comunales y comunidad en general. Para el
logro de este proceso, se deben crear en todas las instituciones educativas del
circuito LOS COMITÉS COMUNITARIOS DE INCLUSIÓN ESCOLAR surgidos de los mismos
consejos educativos. Para la conformación de los comités comunitarios de
inclusión escolar, se parte de la premisa de que la mayor garante de la
inclusión y prosecución escolar es la comunidad misma, desde lo vecinal, lo
contiguo. Desde el conocimiento de la comunidad donde vivimos, las personas
sabemos quiénes estudian y quiénes no, quiénes abandonaron sus estudios o
quiénes necesitan ingresar por primera vez a un plantel.
La conformación de los comités
comunitarios de inclusión escolar, permite superar la discrecionalidad
(secuestro de información) y genera la posibilidad de crear procesos más
humanos donde las personas se conocen y participan de manera protagónica en la
garantía de inclusión escolar de sus hijos e hijas. Los Comités comunitarios de
inclusión escolar deben estar activos durante todo el año escolar, velando por
atender las situaciones de exclusión, discriminación o de abandono escolar.
Para este proceso comunitario de
inclusión escolar queremos resaltar tres
banderas:
Garantizar educación de calidad
para todas y todos, sin ningún tipo de exclusiones. LA MAYOR CALIDAD ES LA
INCLUSIÓN. Es tarea prioritaria elevar la cobertura en educación en todos los
niveles y modalidades, brindando especial atención a las poblaciones en
condiciones de pobreza extrema, zonas de frontera, zonas alejadas de centros
urbanos, adultos y adultas, pueblos indígenas y afrovenezolanos, y personas con
necesidades educativas especiales.
Lograr una estrecha relación
entre las familias, la escuela y la comunidad, en función de garantizar la
atención, el cuidado y la educación de sus hijos e hijas, abrir la escuela a la
diversidad, la interculturalidad y la generación de aprendizajes desde las
características propias de cada localidad. Resaltando que el ESTADO DOCENTE
debe promover la participación protagónica de la comunidad educativa en la
gestión escolar (Art. 6, numeral 2, literal g, LOE) y el derecho que tienen los niños, las niñas y
adolescentes de estudiar en las cercanías de su residencia, es indispensable
que el proceso comunitario de inclusión escolar cree las condiciones para el
logro de estos derechos bajo la concurrencia de la familia, la escuela y la
comunidad.
38
Reconfigurar la organización y
funcionamiento del Ministerio del Poder Popular para la Educación, MPPE, en
función de lograr una gestión participativa, eficaz y transparente. Todo esto
implica otros enfoques, lógicas y métodos de la gestión escolar, consecuentes
con los principios y criterios establecidos en nuestra Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela y la Ley Orgánica de Educación en el proceso
de refundación de la República.
La incorporación de los consejos
educativos y los comités comunitarios de inclusión escolar, el trabajo en
equipo en el circuito educativo, la construcción y unificación de criterios
para la inclusión escolar de los niños, las niñas y adolescentes de la
comunidad, genera formación, organización y convivencia de las personas en sus
contextos de vida. Para el logro de la inclusión y atención escolar es
necesario el compromiso, la honestidad, la corresponsabilidad, la concurrencia,
la complementariedad, el bien común y la convivencia como principios que guían
las lógicas y métodos.
Para desarrollar un proceso
comunitario de inclusión escolar es necesario contrastar con las políticas
heredadas de zonificación escolar que debemos superar, caracterizadas por la discrecionalidad, la
representatividad, lo administrativo por encima de lo humano, más homogéneo y
menos contextualizado y distorsiones tales como el amiguismo, clientelismo y el
uso inadecuado del poder en el tráfico de cupos, redundando todo en exclusión,
desigualdades e injusticias.
En la modalidad de Educación
Especial, cada institución debe ORIENTAR A LOS PADRES, LAS MADRES Y
REPRESENTANTES ACERCA DE LA INFORMACIÓN QUE SE NECESITA PARA ATENDER DE MANERA
ADECUADA Y PERTINENTE A UN NIÑO, UNA NIÑA, ADOLESCENTE, JÓVEN O PERSONA ADULTA
QUE TIENE UNA NECESIDAD EDUCATIVA ESPECIAL (informe médico, informe psicológico,
evaluación previa adecuada), lo importante en esta situación es que la escuela
solicite la información que le permita decidir (sin discriminación, sin errores
de juicio y sin exclusión y sin discriminación), cuál es la atención verdadera
que necesita según la condición que presenta, siempre considerando como
prioridad absoluta e interés superior, a los niños, las niñas y adolescentes y
en el caso de personas adultas, el derecho humano a la educación con
pertinencia según la condición que presenta.
Se deben considerar todos los
aspectos que influyen al momento de tomar una decisión relacionada con una
situación determinada. Considerando siempre LO HUMANO POR ENCIMA DE LO
ADMINISTRATIVO (nunca sacrificar una necesidad humana por facilismo o comodidad
administrativa o porque se creó un programa automatizado y “lo rechaza el
programa”). Las necesidades de inclusión escolar son de seres humanos.
Necesario tratarlo con ese enfoque, con comprensión y respeto. Por ejemplo,
aunque la Ley Orgánica de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (LOPNNA)
establece que todo niño y toda niña debe estudiar lo más cercano a su
residencia, existen casos en los cuales la madre, el padre o persona
responsable necesita que el niño, la niña o adolescente estudie lo más cercano
a su trabajo (de la persona adulta), para la mayor protección. En este sentido,
es necesario resguardar la tranquilidad familiar y la protección del niño y la
niña. Esta situación es más común en zonas urbanas y cascos centrales de
ciudades. El criterio es que se favorezca la tranquilidad familiar en cuanto a
la cercanía al trabajo o a la residencia según sea el caso.
39
POCO A POCO SUPERAREMOS LA
CULTURA DEL CUPO, DEL REQUISITO, DEL COBRO, DE LA INSCRIPCIÓN OBLIGATORIA EN
GRADOS INTERMEDIOS. JUNTAS Y JUNTOS VAMOS CONSTRUYENDO CON FORMACIÓN PERMANENTE
Y CON SUPERVISIÓN ADECUADA LA CULTURA ESCOLAR EN, POR Y PARA LA INCLUSIÓN.
DEBEMOS TENER PACIENCIA Y FIRMEZA PARA GARANTIZAR CADA VEZ MÁS LA INCLUSIÓN EN
EL GOCE Y EJERCICIO DEL DERECHO HUMANO A LA EDUCACIÓN.
Clima escolar amigable y de
convivencia. Plan integrado de seguridad escolar en, por y para el vivir bien
Aunque todas las banderas son fundamentales y están permanentemente vinculadas
como un todo, para la construcción colectiva del plan integrado de seguridad
escolar en, por y para el vivir bien, queremos resaltar dos banderas: Una
pedagogía del amor, el ejemplo y la curiosidad en la cual todos los sectores
consultados manifestaron la necesidad de que la escuela brinde seguridad
afectiva a los niños, las niñas, adolescentes y jóvenes y que los maestros, las
maestras y demás miembros del personal sean testimonio de vida y se conviertan
en referentes positivos, fomentando, a través del ejemplo y la curiosidad, la
pregunta, la investigación, el deseo y disfrute por el conocimiento, la
identidad y un aprendizaje de vida, en, por y para la vida y el ejercicio de la
ciudadanía. Promover un clima escolar caracterizado por la convivencia y la
paz. Las escuelas como territorios de paz, apuntando a que todos nuestros
centros educativos sean lugares seguros y profundamente democráticos, donde no
existan prácticas de acoso, discriminación, castigos, maltratos verbales o
psicológicos ni hechos de violencia o ejercicios autoritarios.
Un ambiente escolar donde las
normas y acuerdos de convivencia estén claras y construidas democrática,
participativa y protagónicamente; logrando una actitud positiva hacia el
estudio, la solidaridad, el fomento a la interculturalidad y el respeto y reconocimiento
a la diferencia. En síntesis, nuestras instituciones educativas, en todos los
niveles y modalidades, deben ser espacios de INCLUSIÓN EN EL GOCE Y EJERCICIO
DE LOS DERECHOS, LA IGUALDAD EN CONDICIONES Y OPORTUNIDADES Y DE JUSTICIA
SOCIAL. El plan integrado de seguridad escolar en, por y para el vivir bien es
una iniciativa intersectorial e interinstitucional que busca la concurrencia y
la sinergia para abordar de manera INTEGRADA E INTEGRAL la satisfacción de las
necesidades humanas, entre las cuales se encuentra la seguridad en salud,
alimentación, ambiente, recreación, cultura, defensa de la vida, en fin, la
suprema felicidad social que permita el vivir bien tanto en lo individual como
en lo colectivo. Esto es posible a través de la participación activa de la
familia, la comunidad y la escuela de la mano con los organismos e
instituciones que deben garantizar y viabilizar los procesos EN EL CIRCUITO
EDUCATIVO. Es así como, todas las instituciones u organismos del estado, a
través de sus servidores públicos y servidoras públicas estamos en la
obligación de acompañar a nuestras instituciones educativas para la formación y
orientación en este vivir bien: Los Ministerios del Poder Popular Para: la
Educación, la Salud, la Juventud y el Deporte, Ecosocialismo y Aguas, Energía
Eléctrica, la Alimentación, Agricultura Urbana, Cultura, la Mujer e Igualdad de
género, las Comunas y movimientos sociales, relaciones interiores, justicia y
paz; Poder Ciudadano, SAIME, el
40
Ministerio Público, Defensoría
del Pueblo, Defensorías de niños, niñas y adolescentes, Contraloría General de
la República, Poder Moral, Consejos Municipales de Derecho, Tribunales de
Protección, Instituto Nacional de Tránsito Terrestre (INTT), Universidad
Nacional Experimental de Seguridad (UNES), Sistema de Protección de Niños,
Niñas y Adolescentes, bomberos, policías, Protección Civil, la Oficina Nacional
Antidrogas (ONA), el Instituto Nacional del Deporte IND, todas las misiones
sociales, la Gran Misión a Toda Vida Venezuela, entre otros, que de alguna
manera contribuyan a fortalecer la formación integral de nuestros y nuestras
estudiantes. ABORDAJE INTEGRAL EN, POR Y PARA EL VIVIR BIEN La mayoría de las
veces nos abrumamos y preocupamos por situaciones de riesgo e inseguridad que
ocurren en nuestras instituciones educativas y sus comunidades, y muchas veces
queremos “atacar” el problema desconociendo sus aristas, causas, componentes,
en fin, sin una pertinente y legítima caracterización del mismo, sin las
metodologías adecuadas ni prioridades colectivas, entre otras características.
LA ESTRATEGIA QUE SE PROPONE PARA ESTE TRABAJO INTERSECTORIAL ES LA
CONSTRUCCIÓN COLECTIVA DEL MAPA DE ABORDAJE INTEGRAL EN, POR Y PARA EL VIVIR
BIEN. Esta construcción colectiva del mapa de abordaje integral en, por y para
el vivir bien no es necesariamente una panacea, pero contiene principios,
criterios, preceptos y premisas que nos deben permitir un abordaje más
eficiente de los problemas y situaciones de riesgo más resaltantes en nuestras
instituciones educativas. La propuesta es constituir un COLECTIVO
INTERSECTORIAL EN CADA REGIÓN, QUE
ACOMPAÑE EN NUESTROS CENTROS EDUCATIVOS a través de una metodología común que
permita estrategias y acciones con criterios transformadores. PRINCIPIOS: Los
principios que debemos asumir para el abordaje intersectorial de nuestras
instituciones educativas son: Concurrencia, sinergia, corresponsabilidad,
convivencia, complementariedad, transparencia, honestidad en la intención,
sinceridad, cohesión, coherencia, endogeneidad, integralidad, reconocimiento y
respeto a la diferencia y la diversidad, reconocimiento de lo multiétnico y
pluricultural, construcción colectiva y la sistematización permanente de las
experiencias, como principios metodológicos, participación protagónica, la no discrecionalidad,
la contextualización, la legitimidad de los procesos y la pertinencia social,
cultural, política, ambiental y económica que le da sentido a lo que hacemos en
los diversos contextos. Los procesos genuinos que cumplen con todos estos
principios, permiten CREAR CONDICIONES de participación colectiva que, a su
vez, en tanto sean legítimas y pertinentes, CALAN Y DESENCADENAN procesos para
el verdadero vivir bien. PRECEPTOS Y PREMISAS: • Niños, niñas y adolescentes
como prioridad absoluta e interés superior. • Todo lo que hacemos debe ser
siempre formativo, experiencias de vida para la construcción de una cultura
escolar, familiar y comunitaria distinta. • Siempre propiciar, favorecer y
fortalecer la inclusión. La prioridad es que nuestros y nuestras estudiantes se
formen, tengan una vida sana, bonita, con desarrollo de sus potencialidades.
41
• Superar la cultura de
“depurar”, “sanear”, “son irrecuperables”, “son lacras de la sociedad”, “ahora
si hay “paz escolar”, ya expulsamos a los que no servían”, todas expresiones de
la vieja cultura de seleccionar, de excluir, de discriminar y de no comprender
QUE LA EDUCACIÓN ES UN DERECHO HUMANO. • El proceso de construcción colectiva
es tan importante como los productos. El proceso de construcción colectiva es
en sí mismo formativo. • Involucrar en todo momento a los y las estudiantes en
la construcción de las soluciones de sus propias problemáticas DESDE UNA
CULTURA DE VIDA Y UN ENFOQUE DE PREVENCIÓN. • Aprender a aprender, aprender
haciendo y aprender en colectivo y en convivencia. • La construcción colectiva
del mapa de abordaje integral en, por y para el vivir bien debe permitir, a
través de la metodología adecuada, abordar las distintas problemáticas y
situaciones de riesgo priorizando, concentrando esfuerzos y seleccionando
problemáticas según las necesidades sentidas de las distintas comunidades
escolares del circuito escolar. • Establecer prioridades de situaciones a
abordar: drogas, embarazo a temprana edad, violencia escolar, desnutrición,
problemas ambientales, entre otros. • Partir siempre del AUTODIAGNÓSTICO
PARTICIPATIVO Y COMUNITARIO, es decir,
de lo que la misma gente considera son sus mayores problemáticas y las
causas que las generan, las debilidades, las fortalezas y potencialidades con
que se cuentan para sus soluciones.
Cada zona educativa debe
conformar la mesa del vivir bien en su región y construir el plan de trabajo
para el acompañamiento de las instituciones educativas en la construcción
colectiva del mapa de abordaje integral. Este proceso se debe comenzar en el
inicio del año escolar (revisar el calendario escolar del año escolar
2016-2017).
Estas orientaciones no son
recetas, ni parten de cero. Son la continuación de logros y avances de la
educación bolivariana, son retos y compromisos que debemos asumir para un
proceso de transformación curricular e institucional indetenible con el
esfuerzo, la voluntad y el compromiso de todos y todas en la consolidación de
la escuela que queremos, la escuela como prefiguración de la sociedad que necesitamos
en nuestra patria, un país que decidió ser productivo y soberano. La CRBV nos
une y nos encuentra como nación, todas estas orientaciones están enmarcadas
en nuestra Carta Magna para tener una
perspectiva común en este nuevo año escolar en el cual, como nos establece en
su artículo 3, LA EDUCACIÓN Y EL TRABAJO
SON LOS PROCESOS FUNDAMENTALES PARA ALCANZAR LOS FINES DEL ESTADO. Juntos y juntas lo haremos posible.
Septiembre, 2016
42
No hay comentarios:
Publicar un comentario